por Guadalupe Yaujar Díaz

En homenaje a Raúl Gómez García, conocido como el poeta de la Generación del Centenario, el 14 de diciembre, natalicio del bardo, se celebra en Cuba el Día de los trabajadores de la Cultura.

Maestro, poeta y periodista, Gómez García nació en la Habana el 14 de diciembre de 1928. En la literatura encontró su modo de expresión, tanto en la poesía como en la prosa política, que puso al servicio de su causa revolucionaria.

Martiano de convicción y revolucionario consecuente en la lucha contra la tiranía de Fulgencio Batista, participó en la elaboración y edición de los periódicos clandestinos Son los mismos y El Acusador. Con las orientaciones de Fidel Castro, redactó el Manifiesto del Moncada, documento que deja bien claro los objetivos de aquellos jóvenes, agrupados en la Generación del Centenario.

Sus poemas poseen un lirismo que va más allá de lo convencional en la poesía de amor de la época. No son pocos y variados los poemas de amor de Raúl Gómez García, en los cuales se pone de manifiesto la manera espontánea con la que expresaba su amor por la novia. Entre ellos merecen destacarse Paradoja, Fantasía por tu amor, Lamento por tu ausencia, Envío  y Sinfonía estival.

Su texto mas conocido, Reclamo del centenario, fue escrito el 28 de enero de 1953 con motivo del Centenario del Apóstol José Martí.

El escrito constituye un testimonio de la influencia martiana en los jóvenes que asaltaron el cuartel Moncada de Santiago de Cuba el 26 de julio de 1953.

Su poema “Ya estamos en combate”, fue leído por él, momentos antes de partir a la acción armada . Después del combate fue hecho prisionero. Antes de ser asesinado, tuvo tiempo de redactar una nota a su madre en el que le informaba de su arresto: “Caí preso, tu hijo”. Pero a la prisión le siguieron la tortura y el asesinato.

Se sabe que en los últimos momentos de su vida, Raúl Gómez García recitaba un fragmento de su poema Reclamo del Centenario, donde evocaba a José Martí. “Maestro, bajo tu frente enorme, en la profundidad perenne de tus sueños, se vislumbra el recuerdo de tus luchas de hombre; y en la angustia callada de este pueblo que es tuyo hay mil gemidos juntos calmándose en silencio”.

Raúl Gómez García, mártir del Sindicato Nacional de la Cultura, se inmortalizó en la historia de la Patria y hoy más que nunca los trabajadores del sector le rinden tributo merecido con el compromiso de mantener la memoria cultural e histórica del país.