Entrada a la Quinta de los Molinos

La Quinta de los Molinos es una institución Monumento Nacional ubicada en un lugar céntrico de la Habana, con una amplia y complicada historia que la relaciona, desde la época de la colonia, con varios acontecimientos y personajes, principalmente con el Generalísimo Máximo Gómez.

El área original superaba al territorio que ocupa actualmente, pues se extendía al norte hasta aproximadamente la locación de la Universidad de la Habana; al noroeste hasta el hoy Hospital Calixto García, fundado originalmente con el nombre de Alfonso VIII, en 1896; al oeste hasta la calle G, incluyendo el Castillo del Príncipe; al sur hasta la avenida Salvador Allende y al este hasta la calle Infanta.

Planos de la Quinta de los Molinos

En la actualidad solo ocupa el terreno comprendido entre las calles Carlos III, G, Zapata e Infanta.

La entrada principal se encuentra en la acera norte de la avenida de Carlos III, hoy Salvador Allende, entre las calles Luaces y Almendares, a aproximadamente 2 kilómetros del Centro Histórico de la Ciudad

Este lugar adquiere el nombre Quinta de los Molinos, debido a la antigua existencia de dos molinos utilizados para moler tabaco. El tabaco era de mucha demanda a finales del siglo XVIII, en toda Europa, y en particular en España.

Los molinos funcionaron hasta la segunda mitad del siglo XIX, movidos por la fuerza del agua de la llamada Zanja Real, primer acueducto con el que contó La Habana.

Viejo Molino de la Quinta de los Molinos

Al desaparecer los molinos del rey, se fundó en este lugar el Jardín Botánico de la Habana, a la par de la construcción de la casa de descanso de los Capitanes Generales.

Hacia ese lugar, fue trasladado El Jardín Botánico desde la primera instalación de este tipo, llamado el Jardín de Tacón, ubicado originalmente donde hoy se encuentra el Parque de la Fraternidad .

A partir de 1820 se realizaron algunas investigaciones y estudios sobre plantas y animales de la zona, por Felipe Poey Aloy.

El herbario del antiguo Jardín Botánico de la Habana, fue el núcleo del cual se partió, para buscar el desarrollo acelerado de la colecta botánica en el país, fue inscrito en 1906 como sitio de referencia importante en el Sistema Mundial de Jardines Botánicos. En ese lugar fue declarada en el año 1936, la mariposa, como flor nacional de Cuba.

Museo Residencia de Máximo Gómez

Asimismo en ese sitio se construyó una pequeña casa quinta, que en las décadas de 1850-1870 fue utilizado como residencia de verano de los Capitanes Generales, y además sirvió como estancia de tránsito para los gobernadores cuando después de entregar el mando, esperaban trasladarse a España.

Una vez terminada la Guerra de Independencia, y Máximo Gómez llegar a La Habana, el alcalde de la ciudad, dispuso entonces que el cuartel general del Ejército Libertador y de su Generalísimo, se establecieran en la Quinta de los Molinos, debido a la gran extensión del terreno.

Ceiba Centenaria

Algunas fuentes citan a la Quinta de los Molinos como la última residencia de Gómez, antes de morir el 17 de junio de 1905.

Hoy en día La Quinta de los Molinos, posee varios senderos por los que se puede recorrer y explorar todo el sitio, en el que abundan además de plantas y aves, fuentes, estanques, pabellones, tarjas que recuerdan la historia y bancos que invitan al descanso y reflexión

Es un enorme jardín abundantemente arbolado, por numerosas especies endémicas de Cuba, muchas de ellas en peligro de extinción y algunas que solo se pueden encontrar en zonas remotas y montañosas.

Isla de los Bonsai

Se destacan las famosas ceibas y varias especies de palmas en el Palmetum, especialmente las cubanas como la Palma real (Roystonea regia), la Palma corcho (Microcycas Calocom), la Palma Hemithrinax ekmaniana.

La enorme Ceiba centenaria en la Quinta de los Molinos. La Ceiba pentandra, en una planta de la familia Malvaceae (anteriormente de las Bombacacea), originaria de América. Puede alcanzar más de 70 metros de altura y su tronco más de 3 metros de diámetro.

Los interesados en la botánica pueden ver una gran cantidad de ejemplares propios de nuestro país, como el árbol de Cedro, la Caoba, Jagüey Blanco, la Guara, el Jacan entre muchos otros.

Dispersas por todo el lugar hay varias fuentes, la principal de ellas se encuentra en la entrada principal. La Isla de los Bonsai, está situada en el centro del estanque.

Aula Verde en la Quinta de los Molinos

Del mismo modo, como lo fue originalmente, en el jardín se exponen varias aves en cautiverio y abundan las que están en estado salvaje.

La Quinta de los Molinos, posee una instalación original y única, el Mariposario, donde se conservan varias especies de mariposas, en una enorme nave cubierta de malla que permite la circulación del aire, pero impide que los insectos escapen.

Mariposario de la Quinta de los Molinos

Con fines educativos, protege gran cantidad de distintas variedades de estos insectos, permite su reproducción, muestra el proceso de metamorfosis, demuestra el papel ecológico que desempeñan en la naturaleza y la necesidad de su protección y conservación.

Gracias al microclima del lugar por la gran cantidad de plantas, las mariposas, que ayudan a la polinización de las plantas y que son muy raras en todas las ciudades debido a la contaminación, viven perfectamente en la Quinta de los Molinos. (Recopilación de Internet)