La aplicación de tecnologías amigables con el entorno en el parque nacional marino Los Caimanes contribuye a solventar prioridades de pobladores de comunidades costeras cubanas y a evitar la extracción de animales en etapa de reproducción, cuando se juntan muchos ejemplares.
El empleo de una variedad de técnicas rentables y sostenibles permite el mayor cuidado de las riquezas naturales, abundantes en 280 kilómetros cuadrados de extensión, ubicados al norte de las provincias de Villa Clara, Sancti Spíritus y Ciego de Avila.
Fue la amplia zona de este parque un sitio tradicional de captura de especies marinas, por eso se han desarrollado prácticas ecológicamente saludables.
En ese espacio marino desovan nueve especies de peces, por lo cual casi todo el año hay hembras soltando sus huevos, mayoritariamente la hembra del pargo, en el verano, y la del pez perro, en el invierno. Se trata de un lugar excepcional en el Caribe, solo similar a otro sitio en Belice, lo que atrae a pescadores.
Granjas de esponjas, cultivos de ostiones y de tilapias, esas últimas tradicionalmente de agua dulce, seleccionadas por su color rojizo y agradable sabor, se crían en esta área protegida, como parte de las alternativas económicas para proteger la vida.
La cría de esponjiarios se probó de forma positiva en Carahatas, en Villa Clara, y se amplía en Punta Alegre, Ciego de Avila, una de las comunidades que más incide en tal entorno; además, preparan condiciones orientadas a la producción de peces de agua dulce.
Según Ángel Quirós, director del Parque Nacional Los Caimanes, varios de esos proyectos se aplican con el apoyo del Programa de Pequeñas Donaciones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial, de Naciones Unidas.
Estos sistemas se experimentaron, con éxito también, en Veracruz y Cancún, en México; mientras en Nicaragua lo practicaron en áreas protegidas destinadas al cultivo de pargo en jaulas flotantes, entre otras tecnologías aplicadas por investigadores villaclareños.
“Los Caimanes” forma parte de la biosfera Buenavista, y es reconocido por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), también Sitio Ramsar del convenio internacional de la Convención Relativa a los Humedales.
El parque marino recibió este año premio especial de Conservación entre los galardones otorgados por el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural.