Por María Josefina Arce.
La biotecnología es uno de los pilares de las relaciones de colaboración entre Cuba y China que se traducen en múltiples beneficios para los ciudadanos de las dos naciones. El intercambio fructífero en esta esfera acumula ya más de 15 años durante los cuales se ha dado vida a empresas mixtas.
En la Zona Especial de Desarrollo de Beiying, la capital china, se levanta como muestra de esa cooperación la empresa mixta cubano-china Biotech Pharmaceuticals, dedicada al desarrollo, producción y comercialización de anticuerpos monoclonales para el tratamiento del cáncer.
Con un producto terapéutico registrado y tres en investigación y desarrollo, Biotech llega con sus productos a más de 300 mil pacientes chinos, que han visto mejorar sus condiciones de vida.
La biotecnología cubana también está presente en el gigante asiático con la firma Changchun Heber Biological Technology, ubicada desde el 2003 en Jilin, en el norte del país, cuyo objetivo fundamental es la manufactura de productos de esa rama.
En la actualidad elabora más de 180 productos biotecnológicos, entre ellos el interferón, del que está considerada como una de las principales distribuidoras en China.
Ambos países han suscrito asimismo, un Acuerdo Marco para la construcción conjunta de la Zona de Cooperación Industrial de Tecnología Biológica Cuba-China, en territorio de la nación asiática.
En aras de avanzar en la consolidación de las relaciones en esta importante esfera La Habana y Beiying establecieron en 2003 un Grupo de Trabajo Conjunto de la Biotecnología Cuba-China, que se ha dado a la tarea de viabilizar los nexos bilaterales.
En los últimos días los dos estados ampliaron su colaboración en esta rama con la rubrica de otro memorando de entendimiento para la apertura de nuevas empresas mixtas dedicadas a producir medicamentos exitosos como el Heberprot, obtenido por científicos del país caribeño y reconocido a nivel internacional por su eficacia para tratar la úlcera de pie diabético.
Eduardo Martínez, presidente de la firma cubana BIOFARMA, señaló en declaraciones a la agencia Prensa Latina que el convenio permitirá la producción y distribución en el mercado chino, de América Latina y de otras zonas del orbe también de otros productos como el PPG para la reducción del colesterol en la sangre, entre otros efectos positivos.
Asimismo, contempla fármacos para el tratamiento del infarto de miocardio, distintos tipos de cáncer y enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, todas con alta incidencia mundial.
El memorando permitirá igualmente el establecimiento de centros de investigaciones conjuntas y completar el ensayo clínico de productos cubanos muy innovadores que están en su fase final de desarrollo.
La cooperación entre Cuba y China en la biotecnología ha avanzado rápidamente durante los últimos años, apoyándose en la tradicional relación amistosa bilateral y en la voluntad política de los gobiernos de los dos países de producir medicamentos eficaces contra diversas enfermedades para beneficio de ambos pueblos.