Por Maria Josefina Arce
Doce años se cumplen en Ecuador de la puesta en marcha de la Operación Milagro, un programa que nació de la mano de dos hombres de gran visión política y de un profundo humanismo, el líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro, y el fallecido presidente venezolano, Hugo Chávez.
Esta iniciativa que en un primer momento benefició a cubanos y venezolanos se fue extendiendo posteriormente a otras naciones de América Latina y el Caribe.
Muchos han sido los beneficios que ha traído este proyecto de alcance social, entre ellos prevenir y tratar las principales causas de ceguera e incrementar la formación de recursos humanos con la más alta tecnología para lograr calidad y eficiencia.
La OMS, Organización Mundial de la Salud, califica de vital importancia este programa si se tiene en cuenta que en el mundo hay más de 135 millones de impedidos visuales, 40 de ellos ciegos por causas prevenibles.
Millones de ciudadanos de escasos recursos se han favorecido con este programa de rehabilitación oftalmológica. Misión Milagro ha llegado a Bolivia, Argentina, Costa Rica, Guatemala, Colombia y Ecuador, entre otros países de la región, que hoy cuentan además, gracias al apoyo de Cuba, con Centros oftalmológicos que asumen las intervenciones quirúrgicas.
En la actualidad se cuenta con más de 50 posiciones quirúrgicas en 14 países latinoamericanos y caribeños, lo que permite diagnosticar y brindar una constante atención médica a las personas con problemas visuales.
En Ecuador sin dudas, esta iniciativa ha marcado un antes y un después. Desde el 2006 se inauguró en la ciudad de Machala, en la provincia del Oro, el primer Centro oftalmológico para dar inicio a la Misión Milagro y que ya en ese país andino ha logrado devolver la visión a miles de ecuatorianos.
A lo largo de los años otros centros fueron sumándose y hoy los ecuatorianos agradecen la alta calidad y el excelente trato de los profesionales cubanos de la salud que les ha permitido recobrar la visión.
El alto desarrollo alcanzado por la medicina cubana ha hecho posible la realización de este proyecto, que no solo ofrece intervenciones quirúrgicas, sino que entrega de manera gratuita lentes correctivos a quienes los necesiten.
En Ecuador Misión Milagro también ha beneficiado a ciudadanos peruanos de escasos recursos que habitan en ciudades limítrofes con la nación andina.
Aunque se inició antes en territorio ecuatoriano, la Misión Milagro también se inscribe en el Programa de Cooperación médica entre Ecuador y Cuba, vigente desde 2012 y que ha favorecido a decenas de miles de personas.
Entre sus máximos logros destaca por supuesto, la Misión Milagro y los trasplantes, fundamentalmente renales. Hasta ahora se han efectuado 158 de estas operaciones y el 98,1% de los beneficiados continúa vivo y estable. Esta cifra, según los especialistas, está por encima de la media internacional de supervivencia de los pacientes trasplantados.
Sin importar raza, edad o situación social la Operación Milagro, nacida de la mano solidaria de Cuba y Venezuela,, devuelve y preserva la visión a millones de latinoamericanos de escasos recursos que no pueden acceder por problemas monetarios a estas intervenciones. Una profunda huella deja ese programa que incluso ha rebasado las fronteras de nuestro continente por su esencia humanista y solidaria.
