Por María Josefina Arce

Situada al norte de Venezuela y de Granada, en el Mar Caribe, es San Vicente y las Granadinas un estado de las Antillas Menores con el que Cuba mantiene desde hace casi tres décadas relaciones de amistad y colaboración, que se han consolidado como países miembros de mecanismos integracionistas como el ALBA, Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América.

A través de este bloque regional al que se incorporó en junio de 2009, la nación caribeña conformada por varias islas ha sido beneficiaria de la colaboración que en determinadas esferas brinda Cuba a los hermanos países del Caribe.

Es en materia de salud en la que esta cooperación tiene una especial significación. Múltiples han sido las iniciativas que han llegado a esos estados de la mano de médicos y especialistas cubanos y que han permitido que la atención sanitaria beneficie a un mayor número de ciudadanos.

De hecho el pasado mes de junio funcionarios del sector de ambas naciones se reunieron para examinar el nuevo Acuerdo de Cooperación bilateral que busca brindar una mejor asistencia médica a la población del país de las Antillas Menores.

Precisamente a inicios de julio quedó inaugurado un moderno Centro Médico y de Diagnóstico, que cuenta con equipamiento y personal médico asegurado por La Habana. Este centro, que es calificado como un monumento a la amistad que une a las dos naciones, está llamado a convertirse en una unidad de referencia local y regional.

Los habitantes de San Vicente y las Granadinas también se benefician desde 2016 del medicamento HEBERPROT-P de gran eficacia para el tratamiento de la úlcera del pie diabético y fruto del desarrollo alcanzado por la biotecnología en la Mayor de las Antillas.

El estudio de discapacidad que especialistas cubanos llevaron a cabo en varias naciones de América Latina como Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua, a través del ALBA, también llegó a ese territorio y posibilitó que el estado brindara una mayor atención a ese sector poblacional, tradicionalmente relegado.

Más de 11 mil 106 viviendas fueron visitadas y se encontraron más de dos mil personas con discapacidad, lo que, de acuerdo con los médicos cubanos, significa que uno de cada 47 sanvicentinos vive con alguna impedimenta severa, con mayor frecuencia en el sexo masculino.

El pesquisaje también posibilitó que esas naciones se beneficiaran de programas con asesoría técnica cubana y la formación de los recursos humanos para la atención a la discapacidad, también con profesores y proyectos de la nación antillana.

Más allá de los lazos de cooperación existe entre los dos pueblos una fuerte amistad que se hizo latente en las especiales relaciones de hermandad que mantenía el líder histórico de la revolución cubana, Fidel Castro, con las autoridades de San Vicente y las Granadinas, en especial su primer ministro Ralph Gonsalves, y que se han mantenido e intensificado.

Precisamente el jefe de gobierno del país caribeño realiza una visita a territorio cubano que vendrá a reforzar unos lazos marcados por el respeto mutuo y el reconocimiento a la soberanía.

Cuba y San Vicente y las Granadinas también aunan esfuerzos para hacer frente a retos comunes como el cambio climático y fortalecer la integración latinoamericana y caribeña en aras del bienestar de sus ciudadanos.