Por Maria Josefina Arce

En el 2019 Bolivia será una de las naciones latinoamericanas en las que tendrán lugar elecciones generales, un proceso que desde ya se vislumbra complejo y en el que sin dudas, la oposición recurrirá como en otras ocasiones a una intensa campaña mediática.

La derecha no logra crecer electoralmente y aun no cuenta con un candidato único y de fuerza, por eso nuevamente ha enfilado sus ataques contra el actual presidente Evo Morales, a quien las encuestas presentan como el favorito entre los posibles candidatos para el 2019.

De hecho en los últimos días las seis Federaciones Sindicales del Trópico de Cochabamba se pronunciaron a favor de la postulación de Morales, en binomio con el actual vicepresidente Álvaro García Linera.

Organizaciones y movimientos sociales en todo el país que apoyan al gubernamental Movimiento al Socialismo también han proclamado su respaldo a la candidatura de Morales, que desde su llegada a la presidencia en 2006 ha realizado profundas transformaciones en Bolivia a favor de los sectores menos favorecidos.

Tengamos en cuenta por ejemplo, que hasta el 2005 el Producto Interno Bruto del país andino era de nueve mil 500 millones de dólares, mientras que en estos 12 años de mandato del Movimiento Al Socialismo la cifra de bienes y servicios producidos llegó a 37 mil 800 millones de dólares.

Sin embargo, la situación aun no es clara. En febrero de 2016 en referendo popular el 51, 30 por ciento de los votantes se declaró contrario a modificar el artículo 168 que limita la reelección presidencial a una sola vez de manera continua.

Pero la realización del referendo estuvo precedida por una fuerte campaña mediática contra la figura de Morales, en los medios de comunicación, con especial énfasis en las redes sociales, La derecha trato por todos los medios de desprestigiar al presidente y obvio todos los logros de su gobierno que cambiaron la imagen de Bolivia a nivel internacional.

En 2017 sin embargo, el Tribunal Constitucional Plurinacional habilitó la repostulación de Evo Morales a la presidencia en los comicios de 2019. En medio de este panorama el Tribunal Supremo Electoral ya señaló que esperará hasta el año venidero para resolver la validez o no de la candidatura del actual mandatario,

La titular de ese órgano, Katia Uriona, dijo que el resultado del referéndum del 21 de febrero de 2016 "es de cumplimiento obligatorio, es vinculante y está vigente", pero que no va a "adelantar criterio alguno" antes del proceso electoral.

Los próximos meses serán sin duda alguna de una fuerte confrontación política. La derecha que busca retornar al poder, pero no cuenta con un candidato de fuerza centrara sus ataques contra Evo Morales, quien no olvidemos ha logrado dar una estabilidad económica, política y social a la nación y que se ha impuesto ampliamente en tres procesos electorales generales.