Por: Roberto Morejón
Muchos niños palestinos regresaron a sus escuelas después del descanso, aunque el financiamiento de los planteles a cargo de la UNRWA, Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina, alcanza para un mes por una medida de fuerza de Estados Unidos.
Al cancelar el presidente Donald Trump una ayuda de 300 millones de dólares a programas humanitarios en Cisjordania y Gaza, los recursos disponibles menguaron y peligran numerosas prestaciones.
Entre ellas la continuidad del año lectivo, pues la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina atiende 377 de casi 3 mil escuelas en Gaza y Cisjordania y tras el recorte de Trump posee menos margen de maniobra.
El organismo especializado de la ONU recibió en enero último otro duro golpe cuando la Casa Blanca congeló el envío de 65 millones de dólares asignados a esa entidad.
Para obligar a la Agencia a adecuarse a sus reclamaciones, Trump le mutila dinero para cumplir sus funciones, o sea, ayudar a unos 700 mil palestinos obligados a huir de sus casas tras la guerra de mil 948.
Los escolares no son los únicos afectados ante el déficit de 217 millones de dólares acumulado por la agencia humanitaria.
Por esa causa se disipan las posibilidades de crear 50 mil empleos para personas sin ocupación.
Mientras castiga a la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina, Estados Unidos afirma paradójicamente estar trabajando duro sobre un alegado plan de paz con destino al Oriente Medio.
El documento sería la base de lo que según la torcida óptica de Trump ayudaría a rescatar la concordia entre israelíes y palestinos, aunque estos últimos lo rechazaron.
Expertos recordaron la escasa credibilidad del pretendido mediador para la paz por ser el baluarte del apuntalamiento militar y diplomático del régimen sionista y trasladar su embajada a Jerusalén el pasado 14 de mayo, contrario a las recomendaciones de la ONU.
El armamento estadounidense dota al Estado belicista de Israel de una influencia gigantesca, empleada, entre otros objetivos, en crear un foco explosivo en los límites con Gaza.
Los casi dos millones de gazatíes sufrieron invasiones israelíes en 2009, 2012 y 2015 y este año han sido blanco de ataques de la aviación enemiga.
El bloqueo general de Tel Aviv origina un drama humanitario en Gaza por las privaciones de alimentos y servicios básicos.
El estrangulamiento de Gaza por Israel y la mutilación de la asistencia estadounidense a la Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina hacen más inverosímiles los alegados intentos de Trump de buscar la paz para la región.
Los derechos humanos básicos de un pueblo son vulnerados por la cofradía Washington-Tel Aviv.