Por: Roberto Morejón
Las Universidades cubanas abrieron su primera semana de la etapa 2019-2020 con los recursos materiales imprescindibles, con énfasis en el fortalecimiento de las relaciones establecidas a nivel municipal y en su vínculo con empresas y el desarrollo del país.
Con un gran esfuerzo para alistar las residencias estudiantiles donde pernoctan matriculados de otras provincias y en la base material de laboratorios y aulas, varios planteles de nivel superior estrenan nuevas especialidades en dependencia de las características de los municipios.
Es así que en algunas regiones abrieron posibilidades de estudios para Contabilidad y Finanzas y en otras con el objetivo de cursar Cultura Física, porque existe déficit de esos egresados.
En academias de la región oriental conforman el Parque Científico Tecnológico, en respuesta a instrucciones del gobierno nacional con vista a relacionar aún más a ese tipo de instituciones con la economía.
Para aplicar las estrategias, el sistema universitario dispone de un claustro experimentado, pues la tercera parte son doctores y más de la mitad son titulares o auxiliares.
Como consecuencia del reciente aumento del salario a los trabajadores del sector presupuestado, miles de profesores del más alto nivel de instrucción hasta ahora jubilados solicitaron la reincorporación al magisterio.
En suma, el Ministerio cubano de Educación Superior cuenta con 32 mil profesores, a cuyo cargo se encuentran 250 mil jóvenes, deseosos de emprender el camino del saber por especialidades muchos años anheladas.
Para los discípulos de los años finales en sus cursos respectivos surge en este año lectivo en Cuba la ubicación en la futura empresa productiva o de servicios, donde transcurrirá su vida laboral.
La disposición facilitará a las jóvenes relacionarse estrechamente con las entidades adonde serán destinados al graduarse, además de elaborar allí la tesis de diploma, según los requerimientos del centro empleador.
Con más conexión a Internet y vínculo con las redes sociales, los estudiantes universitarios cubanos dan un paso sólido hacia la aproximación con la realidad productiva, tal y como demanda el país.
El presidente cubano, Miguel Díaz Canel, insistió en buscar vías factibles para la exportación desde la base, de modo que las potencialidades de los egresados tributen al encadenamiento productivo de la economía.
En Cuba, donde en 60 años de Revolución obtuvieron un título profesional cerca de un millón de personas, las Universidades se insertan más en la sociedad, en función de sus requerimientos.