Por: María Josefina Arce

En las últimas décadas varios han sido los retos para la salud pública. Enfermedades como el zika, el chikungunya y la gripe A H1N1, que llegara a convertirse en una pandemia, han significado verdaderos riesgos para el mundo.

Ahora se sigue de cerca el desarrollo del coronavirus 2019-nCoV, que hiciera su aparición a finales del pasado año en China y que ya reporta casos en otras naciones, pues enfermedades infecciosas como esta extienden su alcance y velocidad de transmisión por el incremento de los viajes internacionales y el comercio.

El coronavirus ya se ha cobrado la vida de más de 213 ciudadanos chinos, el contagio alcanza los nueve MIL 700 y se ha extendido a todo el territorio de esa nación asiática y hay casos en otros 17 países.

Ante esa situación y aunque en Cuba no se ha detectado ningún contagio, el país como en ocasiones anteriores ante situaciones sanitarias internacionales ha adoptado las medidas pertinentes para evitar la entrada de ese mal y su posible propagación.

Se ha reforzado la vigilancia epidemiológica en puertos, aeropuertos y marinas internacionales, con el propósito de detectar, atender y aislar a cualquier persona que presente signos de malestar respiratorio, en especial si procede de países donde se ha confirmado la infección.

El doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología, en conferencia de prensa hizo hincapié en el autocuidado de la población, especialmente de las personas que han viajado recientemente o viajarán hacia cualquier destino, pues este es un virus muy nuevo, aún en estudio, y no se conoce cómo puede evolucionar.

Sin embargo, Cuba, como han reconocido autoridades sanitarias internacionales, cuenta con un consolidado sistema de salud, gratuito y universal.

A esto se suma la gran profesionalidad y preparación de su personal, mientras que su alto nivel de investigación posibilita la alerta temprana de cualquier mal con altas posibilidades de contagio y expansión por el territorio.

La Mayor de las Antillas posee igualmente instalaciones dotadas tecnológicamente lo que permite una rápida y eficaz respuesta ante cualquier enfermedad que suponga una amenaza para los cubanos.

En el país se creó un grupo temporal de trabajo que constantemente está actualizando la información emitida sobre el virus, y elaboró un plan para el enfrentamiento del virus, que incluye la participación de todos los organismos.

Cuba se mantiene alerta y está preparada para brindar la atención médica necesaria a sus ciudadanos, cuya salud es una prioridad para las autoridades.