Por María Josefina Arce
Los turistas comenzaron a abandonar Cuba y a regresar a sus países de origen. El avance inexorable del nuevo coronavirus y el compromiso del gobierno cubano con la salud de su pueblo llevó a la regulación de las fronteras.
La medida, adoptada de acuerdo con los protocolos internacionales, estará vigente por 30 días y podría prorrogarse ante la continuación de las afectaciones por el contagio con el coronavirus SARS-Cov-2.
Esta disposición se inscribe en las tomadas en las últimas horas por las autoridades cubanas y que tienen como finalidad evitar el avance en el territorio nacional de la COVID 19, enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.
Se busca frenar los casos importados de COVID-19 y concentrar los esfuerzos en los que ya existen en el territorio nacional, para salvaguardar la salud del pueblo cubano e intensificar el control de la situación epidemiológica, así como a mitigar las afectaciones económicas a la población.
Hasta este martes los visitantes extranjeros tienen la posibilidad de retornar a sus naciones, para lo cual se han dado todas las facilidades necesarias a turoperadores y aerolíneas.
En el programa televisivo Mesa Redonda, el primer ministro Manuel Marrero explicó que no se trata de un cierre de fronteras, pues los cubanos que se encuentran en el exterior pueden sin ningún problema regresar.
De hecho y como una nueva confirmación de que Cuba no abandona a sus ciudadanos, se ha gestionado el retorno seguro de cubanos que permanecen en Guyana y Haití.
Unos MIL 700 cubanos se encuentran en esas naciones y de manera coordinada con las autoridades de esos países se busca su regreso seguro a nuestro territorio.
La salud de todos los cubanos es una prioridad de las autoridades, de ahí que desde un primer momento se reforzó la vigilancia epidemiológica y con el paso de los días se han adoptado otras medidas necesarias para evitar la propagación del nuevo coronavirus con un alto grado de contagio.