Johnson anuncia un nuevo confinamiento total en Inglaterra ante la propagación de la nueva variante de la COVID-19
Por: Guillermo Alvarado
El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció el retorno a un confinamiento total en Inglaterra que podría durar hasta el próximo mes de marzo, con el objetivo de contener la ola de contagios de la nueva variante del coronavirus que provoca la covid-19.
Las medidas entraron en vigor e implican que los ingleses deben permanecer en sus hogares, las escuelas, centros comerciales no esenciales y sitios de recreación permanecerán cerrados y todas las personas que tengan condiciones deben laborar desde sus viviendas.
Sólo están autorizadas las salidas para comprar alimentos, realizar ejercicios moderados y asistir a los centros de trabajo en el caso de quienes son considerados indispensables y que tengan el permiso correspondiente.
Similares medidas, aunque sólo durante el mes de enero, adoptaron las autoridades locales de Escocia, que junto a Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte forman el Reino Unido.
Los principales jefes médicos de estas cuatro regiones enviaron una carta conjunta a Johnson donde dicen no estar convencidos de que el sistema de salud tenga capacidad de administrar un nuevo aumento exponencial de casos y podría quedar rebasado en menos de 21 días.
También el líder de la oposición laborista en el Parlamento, Keir Starmer, había reclamado medidas más fuertes para contener la nueva cepa de SARS-CoV-2 que, dijo, está fuera de control.
Reino Unidos empezó el 8 de septiembre la vacunación contra la covid-19 y ya administró la primera dosis del preparado de la firma Pfizer a un millón de personas, en lo que lleva la delantera al resto de Europa occidental.
A partir de esta semana se comenzó a usar el inmunizante fabricado por el consorcio británico AstraZeneca/Oxford, del que Londres hizo un pedido de cien millones de dosis.
Esta vacuna tiene varias ventajas respecto a la Pfizer, entre ellas ser mucho más barata y más fácil de almacenar, porque sólo requiere una temperatura de entre menos dos y menos ocho grados Celsius, es decir la que ofrece un refrigerador común y corriente.
La gran incógnita para los especialistas, sin embargo, es si tales productos serán capaces de inmunizar contra la nueva variante del virus, que ha causado un súbito rebrote de la enfermedad en Inglaterra y se ha descubierto ya en muchos países del mundo.
Hasta ayer martes se registraron en Reino Unido 2,71 millones de casos y casi 75 mil 500 fallecidos, cifras que demuestran que además de la vacuna, se requiere un cambio de actitud para enfrentar esta crisis.
