Por: María Josefina Arce
Limitar la colaboración médica con Cuba carece de sentido, afirman en Estados Unidos.
Bajo la administración del ex presidente Donald Trump fueron varias las ciudades estadounidenses que demandaron que se solicitará la ayuda médica cubana para el enfrentamiento a la COVID 19, que ha afectado con fuerza a Estados Unidos.
Más de una decena de urbes como San Francisco, Sacramento, Richmond y Cambridge pidieron que se levantaran las restricciones al acceso a la experiencia médica cubana y a fármacos como el INTERFERÓN producido en Cuba y que se emplea con éxito contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, incluso en otras naciones.
En esa ocasión Hillary Ronen, miembro de la Junta de Supervisores de la ciudad y condado de San Francisco, afirmó que limitar la cooperación con la Mayor de las Antillas carecía de sentido, al tiempo que resaltó las importantes medicinas desarrolladas por la industria farmacéutica cubana que, dijo, deberían estar disponibles en Estados Unidos.
Pero Trump puso primero las cuestiones políticas que la salud de los estadounidenses. Ignoró el reclamo de sus conciudadanos y reforzó las sanciones contra el pueblo cubano, mientras llevaba a cabo una campaña contra la ayuda de los profesionales cubanos a otros países.
Ahora a solo pocos días de la asunción de Joe Biden como nuevo presidente de Estados Unidos comienzan a escucharse nuevamente los reclamos de una colaboración bilateral. En ese sentido se pronunció el ayuntamiento de Seattle para lograr más efectividad en la lucha contra la COVID 19.
Estados Unidos tiene el mayor número de decesos y casos positivos de la enfermedad causada por el nuevo coronavirus en las Américas, recuerda la resolución aprobada por el Ayuntamiento.
Las autoridades llamaron a sus instrucciones médicas, de atención a la salud, científicas, académicas y farmacéuticas a explorar activamente la cooperación con sus contrapartes cubanas.
La resolución afirma que Seattle y todo Estados Unidos y el mundo se pueden beneficiar del intercambio entre instituciones y gobiernos para combatir juntos la pandemia.
Las autoridades de las distintas ciudades estadounidenses han reconocido que Cuba tiene una larga trayectoria en brindar asistencia médica a otros pueblos del mundo, especialmente a los países en desarrollo.
Ahora con la COVID 19 la Mayor de las Antillas ha brindado su humilde aporte al enfrentamiento del mundo a la pandemia. Sus profesionales de la salud han marchado a diversas latitudes a salvar vidas, poniendo en riesgo las suyas.
Solidaridad y humanismo es lo que distingue a nuestros médicos y enfermeras, que nunca han vacilado en socorrer a otros pueblos.
