EEUU: Consejo de Chicago pide levantamiento del bloqueo a Cuba.
Por María Josefina Arce
Múltiples áreas de intercambio con Cuba en la producción de alimentos, salud, educación, turismo e investigaciones biotecnológicas identifica el Consejo de Chicago, en su reclamo al gobierno del presidente Joe Biden de que ponga fin al bloqueo norteamericano contra la nación caribeña.
Aprobada en las últimas horas por unanimidad, la resolución hace referencia a los beneficios que puede reportar el levantamiento de esa medida criminal no solo para el pueblo cubano, sino también para el estadounidense.
Chicago se convierte así en la décimo octava ciudad en pedir el cese de la política hostil de Estados Unidos, que solo de abril de 2019 a marzo de 2020 provocó daños a la Mayor de las Antillas por más de cinco MIL millones de dólares.
Un genocida bloqueo que la anterior administración, presidida por Donald Trump, se encargó de recrudecer, aún en medio de la COVID 19 y que representó un obstáculo para el enfrentamiento a la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
Desde 2016 hasta la fecha en territorio estadounidense se han aprobado 28 resoluciones de este tipo que incluyen también a legislaturas estatales y que abarcan además, la cooperación con los sectores médico y farmacéutico.
En las últimas semanas ha crecido el reclamo a Biden, quien durante su campaña electoral, recordemos, prometió realizar cambios sustanciales en la política de Washington hacia el archipiélago cubano.
Numerosas personalidades religiosas, políticas, empresarios, científicos y estadounidenses solidarios han solicitado al nuevo mandatario hacer las gestiones necesarias en el Congreso para levantar las sanciones unilaterales contra los cubanos.
Es hora de que Estados Unidos escuche al mundo y a gran parte de sus ciudadanos, partidarios del fin del genocida cerco y de la normalización de las relaciones entre las dos naciones.
Cada año en la ONU se escucha la voz de la comunidad internacional en contra del bloqueo norteamericano, que afecta importantes esferas como la salud y la educación y pone trabas al avance económico de Cuba.
Veintiocho resoluciones se han aprobado en el seno del organismo internacional, condenatorias de una política calificada por el mundo de criminal, obsoleta y fallida.
En mayo venidero se retomará el debate, pospuesto el pasado año por la COVID 19, del proyecto de resolución cubano sobre la necesidad de poner fin al cerco económico, comercial y financiero de Estados Unidos que durante casi 60 años ha intentado infructuosamente rendir por hambre y enfermedades a los cubanos.
Se espera que como ya es habitual sea mayoritario el respaldo a Cuba, como evidenció el hecho de que ni aún la pandemia impidió que el mundo expresara a lo largo del 2020 su rechazo a la agresiva postura de Washington.
Seguramente se vivirá otra jornada histórica en la ciudad de Nueva York, que ratificará que el mundo está junto a Cuba, una nación que a pesar de las adversas condiciones económicas no dudó ni un segundo en ayudar a otros pueblos en el enfrentamiento a la COVID 19, escribiendo una nueva página en su larga historia de solidaridad y humanismo.
