Sputnik Mundo

Por María Josefina Arce.

Tres meses se cumplirán próximamente de la asunción del ex banquero Guillermo Lasso como presidente de Ecuador,  y ya comienzan a aflorar desavenencias entre parte de la sociedad y el nuevo gobierno, en el que muchos habían puesto sus expectativas tras el desastroso mandato de su antecesor Lenín Moreno, cuyas medidas neoliberales llevaron a una crítica situación económica y social, agravada por la COVID 19.

Hoy los ecuatorianos siguen esperando que Lasso empiece a cumplir sus promesas de campaña y adopte medidas a favor de los más humildes, para quienes se ha vuelto insostenible la difícil situación económica por la que atraviesa el país.

Crear nuevas fuentes de trabajo y acabar con el hambre de un millón de ciudadanos fueron algunas de las propuestas, que los ciudadanos le reclaman al presidente.

Siete de cada diez ecuatorianos están sin trabajo, mientras que más del 51 por ciento se desempeña en el sector informal, sin ningún tipo de garantía.

De acuerdo con las estadísticas, en diciembre pasado la pobreza se situaba en 32,4% , un aumento del 7,4% en relación al 2019 

En el área urbana este indicador era de 25,1% , mientras que en el campo la situación era mucho más compleja al sobrepasar el 41% .

Y aunque muchos califican de positivo el impulso dado a la campaña de vacunación, luego de los escándalos durante el recién concluido mandato de Moreno, afirman que esta debe estar acompañada de acciones que beneficien a los más vulnerables y que no representen nuevas cargas para las mermadas finanzas familiares.

Ese es el caso de los planes del gobierno de liberar el precio del combustible, lo que ha desatado las críticas de organizaciones sociales, sindicales e indígenas que se apresuran a expresar su rechazo.

Para este miércoles ha sido convocada una jornada nacional de protesta, en reclamo de un tope del precio del combustible, mayor control de los costos del pasaje y de los productos de primera necesidad.

Los manifestantes también pedirán la creación de nuevos puestos de trabajo, ante la crítica situación del mercado laboral en la nación suramericana.

Wilson Álvarez, presidente de la Federación de Trabajadores Municipales y Provinciales, afirmó que hasta ahora no se han cumplido los ofrecimientos de campaña del presidente Lasso.

Otro aspecto que causa preocupación en la ciudadanía es que las autoridades anunciaron un aumento de las actividades extractivistas como la minería y petrolera, lo que pondría en riesgo a las comunidades indígenas. Ese será precisamente otro de los motivos de la protesta.

Los ecuatorianos claman por mejoras en sus condiciones de vida, tras el mandato del hoy ex presidente Lenín Moreno que cambió el rumbo del país y lo hundió en una aguda crisis económica y social.