Por María Josefina Arce
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Satisfactoriamente avanzan en el área de la salud los proyectos que se desarrollan en Cuba con el apoyo del OIEA, Organismo Internacional de la Energía Atómica, al que nos unen décadas de una fructífera e invaluable colaboración.
Durante cinco días expertos de la Oficina de Servicios de Supervisión Interna evaluaron los programas conjuntos puestos en marcha en el período comprendido entre 2016 y 2022, y que tiene como finalidad catalogar la actuación de la entidad en un Estado miembro.
Anualmente se realiza esa evaluación en una sola región geográfica y en el 2023 corresponde a América Latina y el Caribe. En el caso de Cuba incluyó áreas de salud humana, producción de radiofármacos, diagnóstico y tratamiento del cáncer, así como cardiología nuclear, radioterapia, capacitación en Física Médica y seguridad nuclear.
Respecto al cáncer es bueno destacar que la asistencia del OIEA permitió la introducción en la nación caribeña de la técnica de ciclotrón, destinada a la producción de radiofármacos para el diagnóstico y tratamiento de esa dolencia, una de las principales causas de muerte en territorio cubano.
De hecho las autoridades del país han destacado la importancia del apoyo del organismo en la utilización de la tecnología nuclear en la atención médica y en particular en la lucha contra el cáncer.
Visitas y entrevistas en centros de salud, ciencia y educación de La Habana donde se han ejecutado proyectos con el organismo Internacional incluyó está Evaluación y Auditoría a nivel de país.
El respaldo brindado a la Mayor de las Antillas se ha materializado en efectivas iniciativas, pero también ante situaciones complejas como la pandemia de la COVID 19. En ese momento se transfirió al archipiélago tecnología de punta, consistente en Kits diagnóstico y para la preparación de muestras, sondas, cabinas de bioseguridad y módulos de protección personal.
A raíz del accidental incendio en agosto pasado en la base de supertanqueros de Matanzas, el OIEA donó aparatos para fortalecer la red de laboratorios dedicados al estudio de la atmósfera, el suelo y el agua para determinar su calidad.
La colaboración es mutua, nuestro país respalda el programa que el Organismo Internacional de Energía Atómica desarrolla en América Latina y el Caribe mediante la participación de especialistas en misiones en otras naciones.
Asimismo en suelo cubano han recibido capacitación físicos médicos sobre el nuevo código de práctica Internacional sobre dosimetría, consistente en la medición de la exposición a la radiación de los rayos X, gamma u otros tipos que se usan en el tratamiento o la detección de enfermedades.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica ha calificado de encomiables los resultados de la aplicación de la ciencia y la tecnología nuclear en Cuba, que a su vez ha catalogado de excelentes las relaciones entre las dos partes y manifestado su disposición de seguir cooperando con otras naciones del área en el uso de las tecnologías nucleares con fines pacíficos.