Díaz-Canel y Luis Arce conversaron sobre las modalidades para reforzar la cooperación bilateral.
Por Roberto Morejón
Como parte de visitas oficiales, de trabajo o para asistir a reuniones de carácter internacional, el presidente boliviano, Luis Arce, ha arribado a La Habana en varias ocasiones, la última de ellas recientemente.
El primer mandatario cumplió una permanencia con fines de trabajo, según la definieron las autoridades de Bolivia y Cuba, las cuales destacaron el calificativo de hermano al referirse a los Jefes de Estado de cada nación.
El presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel, atendió a su huésped y ambos conversaron sobre las modalidades para reforzar la cooperación bilateral.
El desplazamiento de Arce a La Habana siguió al envío de ayuda humanitaria, básicamente en alimentos, con destino a damnificados por intensas lluvias en el oriente de la mayor de las Antillas.
Como destacara el viceministro de defensa Civil de Bolivia, Juan Carlos Calvimontes, su país se solidariza con Cuba, pues -dijo- sufre las consecuencias del cambio climático y del bloqueo económico de Estados Unidos.
Los cubanos acogieron con honda gratitud anteriores gestos similares del país sudamericano en ocasión de la pandemia por la Covid-19 y accidentes.
Para satisfacción de ambos pueblos, fue posible retomar los nexos después de un quebrantamiento durante el régimen de facto de Jeanine Áñez.
Hoy ha sido posible acoger nuevamente al presidente Luis Arce, en quien los cubanos reconocen un experto en economía, además de sus otras cualidades políticas.
En marzo último, también visitó La Habana una importante autoridad del país andino, el presidente de la Cámara de Senadores del Estado Plurinacional, Andrónico Rodríguez, quien aseguró que continuará trabajando a favor de la cooperación.
El joven Andrónico informó en entrevista a esta radioemisora su disposición a promover los objetivos propuestos por los presidentes de Bolivia y Cuba y subrayó el interés por lograr que la aerolínea estatal de su país tenga vuelos directos a la nación caribeña.
El legislador manifestó disposición a compartir experiencias en la producción de soya, maíz y otros renglones agrícolas.
Los cubanos saben de los avances de los bolivianos en la agricultura y comparten la satisfacción que les embarga al avanzar en la economía, como en la industrialización del litio, con empresas de China y Rusia.
En el interior del ALBA, Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, y en el plano bilateral, Cuba y Bolivia están persuadidos de la importancia de coordinar recursos en busca del bienestar de ambos pueblos.