Los manifestantes continúan reclamamando la renuncia de Dina Boluarte, celebración de elecciones anticipadas y
proceso para la Asamblea Constituyente. (Imagen de archivo/RHC)

Por María Josefina Arce

Los peruanos se preparan para una nueva multitudinaria protesta en reclamo de la renuncia de Dina Boluarte, quien llegó a la presidencia del país tras el golpe parlamentario de diciembre pasado contra Pedro Castillo, elegido democráticamente en las urnas en 2021 por más de 50 % del electorado.
   
A partir del próximo día 19 y por 10 jornadas Lima, la capital, será el epicentro de las manifestaciones en demanda también de la pronta realización de elecciones generales, una opción dejada en manos del Congreso por Boluarte, presionada ante la intensidad de las movilizaciones populares generadas a raíz de la destitución de Castillo.
   
El órgano legislativo, la institución peor valorada con solo 7% de aprobación, descartó sin embargo, en varias ocasiones el adelanto de los comicios como reclama la ciudadanía. Sus miembros, en muchos casos aferrados a su puesto, nunca lograron ponerse de acuerdo.
   
Boluarte por su parte, se ha negado en todo momento a renunciar e incluso ha señalado que se mantendrá en el poder hasta 2026, cerrando una vía para poner fin a la crisis política y social que vive la nación andina.
  
Desde el golpe contra Castillo, quien cumple prisión preventiva, los peruanos salieron a las calles en una intensa ola de protestas que se extendió de diciembre a marzo último y que fue brutalmente reprimida.
  
Cerca de 70 personas murieron durante las manifestaciones, en las que la ONU consideró hubo un excesivo uso de la fuerza por la policía y el ejército, además de un sesgo racista.
    
De acuerdo con las informaciones, la mayoría de las víctimas de la represión, entre muertos y lesionados, eran indígenas y campesinos.
    
Boluarte incluso, se vio obligada a declarar ante la Fiscalía para responder a las acusaciones en su contra de "genocidio, homicidio calificado y lesiones graves" durante el estallido social en el país. Aunque los expertos señalan que existen serias  dudas sobre la voluntad de investigar esos hechos.
    
Asimismo, un día después de su declaración, el Congreso, controlado por partidos de derecha y extrema derecha, rechazó y archivó una acusación en igual sentido contra la mandataria designada.
   
Pero los peruanos volverán a las calles, en la denominada Jornada Nacional de Movilización Popular Permanente, para reiterar sus exigencias de la renuncia de Boluarte, la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias anticipadas y un proceso para la Asamblea Constituyente.