Mujeres cubanas
por Roberto Morejón
En Cuba, la protección de los derechos de las mujeres permanece como foco de atención de las autoridades y organizaciones políticas y sociales.
En los últimos años comenzó a examinarse en el país la violencia de género con mayor intencionalidad y visión más integral, como corresponde ante situaciones de origen multicausal.
La mayor de las Antillas cuenta hoy con el Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres, destinado a ahondar en afluentes objetivos y subjetivos de las expresiones de discriminación persistentes, aunque la política y los principios por los que se aboga son opuestos a esa segregación.
En una reciente reunión del Partido Comunista, rector de la sociedad, se conoció que el Consejo de Ministros, a través de una viceprimera ministra y el Grupo de Atención al Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres, coordinará la atención, seguimiento y control de la estrategia.
La acertada disposición dado su matiz aglutinador de esfuerzos, se suma a la aprobación en el Consejo de Ministros del Protocolo de actuación ante situaciones de discriminación, violencia y acoso en el ámbito laboral, presentada por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
Además de un aumento del control a nivel de comunidad sobre las familias y mujeres vulnerables a la violencia de género, se trata de lograr en Cuba una mayor aproximación a las particularidades del trabajo informal, donde hay evidencias de ese tipo de extremismos así como discriminación y acoso.
Ante esta y otras manifestaciones y al calor de un enfoque puntual, la sociedad cubana espera por nuevos frutos de la labor conjunta entre el Partido Comunista, el Tribunal Supremo, la Fiscalía General de la República y los Ministerios del Interior y Justicia.
A todo lo anterior se añade la labor permanente de la Federación de Mujeres Cubanas en las comunidades para contribuir a una mayor comprensión sobre la necesidad de prevenir y rechazar lo que atente contra la integridad física y síquica de mujeres y niñas.
Como parte de la supervisión del ejercicio pleno de los derechos humanos, en Cuba se activan las alertas para atajar manifestaciones de violencia de género.