Presidente de Guatemala Bernardo Arévalo
por María Josefina Arce
Próximo a cumplir un mes al frente de Guatemala, se va perfilando la estrategia del presidente Bernardo Arévalo para llegar a los diversos sectores de la sociedad, especialmente a los más vulnerables, entre los que se cuentan niños y jóvenes.
En los últimos días fue derogado el acuerdo gubernamental con el cual se dio vida al cuestionado Programa Seguro Médico Escolar, implementado por el gobierno anterior, encabezado por el entonces mandatario Alejandro Giammattei y que fue una de las promesas de su campaña para las elecciones generales de 2019.
En 2020 se puso en marcha ese programa que no cumplió con las expectativas de la población, y que recibió múltiples críticas pues los menores no recibían la asistencia requerida, que en muchos casos solo era por vía telefónica.
Por demás, no benefició a las zonas rurales, donde el acceso a la salud es deficiente y se registra una alta tasa de desnutrición infantil.
Pero la atención a niños y jóvenes es una prioridad del actual ejecutivo, por lo que la derogación del acuerdo viene acompañada de un análisis entre los ministerios de Educación y Salud Pública y Asistencia Social para lograr un nuevo sistema que permita un eficaz servicio de atención médica escolar.
El presidente ha dejado claro que hay que mejorar la cobertura, accesibilidad y calidad del servicio, que señaló debe estar dirigido a los estudiantes de todos los niveles del sistema educativo público.
Se busca igualmente transparentar la ejecución de los fondos para que cada quetzal invertido, subrayaron las autoridades, se traduzca en beneficios para los estudiantes.
El programa impulsado por el expresidente Gianmattei estuvo en la mira de la ciudadanía por diversas irregularidades como que los alumnos no recibieron la atención acorde con los montos desembolsados.
Maestros de distintos departamentos guatemaltecos denunciaron que la atención no llegaba a sus comunidades.
De ahí que se haya pedido una revisión financiera, operativa y legal del programa a la Contraloría General de Cuentas de la Nación y la Procuraduría, una solicitud respaldada por el Congreso del país centroamericano.
El nuevo gobierno presidido por Arévalo está empeñado en combatir la corrupción y garantizar el acceso de todos los guatemaltecos a los servicios básicos; en ese camino se inscriben sus medidas a favor de la atención sanitaria a niños y jóvenes, un sector altamente vulnerable.