Imagen ilustrativa tomada de Youtube México Noticias.
Por Roberto Morejón
Cuba instó a la CELAC, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, a adoptar una posición firme y unitaria ante lo que calificó de inaceptables sucesos en Quito.
Efectivos armados irrumpieron en la embajada de México, en transgresión de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, para capturar al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien sufrió apremios físicos, al igual que un diplomático.
Toda una barbarie ante una Convención respetada incluso por regímenes de fuerza como el del dictador Augusto Pinochet en Chile a partir de 1973.
Para la mayor de las Antillas, lo ocurrido en Quito motiva un pronunciamiento de la CELAC para que Ecuador cumpla estrictamente sus obligaciones internacionales.
Como es usual en la política exterior de la nación caribeña, se privilegia el diálogo y no la fuerza, de ahí que el canciller Bruno Rodríguez dijera en reunión ministerial de la CELAC que el bloque debe llamar a las partes a conversar o a utilizar cualquier otro recurso dentro del Derecho Internacional.
Rodríguez subrayó la solidaridad y apoyo al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y todo su pueblo ante la inaceptable violación y atropello de su embajada en Quito.
Cuba vislumbró su disposición a acompañar a México en sus próximos pasos frente a la grave transgresión de la misión diplomática en Quito, donde secuestraron a Glas, quien había recibido asilo diplomático.
Recordemos que México presentará una denuncia formal ante la Corte Internacional de Justicia en contra de Ecuador, por lo que López Obrador calificó de “actitud prepotente de un gobierno”.
La posición de Cuba se inscribe en la muy generalizada de América Latina y el Caribe, en respaldo de México, país con intachable trayectoria en el acatamiento de la Convención de Viena.
Latinoamericanos y caribeños llamaron la atención sobre cómo los desmanes contra el político Jorge Glas se extendieron después de su atropellada detención, al impedirle inicialmente el contacto con familiares y equipo defensor.
En nuestra región se recuerda que el ex vicepresidente durante el mandato de Rafael Correa insistió en que las imputaciones a su persona tienen motivaciones políticas.
En contraste con los exabruptos del gobierno de Ecuador, el de México, como dijo su canciller, Alicia Bárcena, hizo un llamado a la calma.