Tres meses después de su aparición en China, 174 países del mundo se enfrentan a la COVID-19, la cual afecta a más de 300 mil personas. El impacto de la pandemia supone numerosos desafíos para los sistemas sanitarios, alimentarios y la economía mundial, así como para nuestra capacidad de protegernos y proteger a los demás mediante la actuación responsable y oportuna.
Todos podemos contribuir a contener, controlar, retrasar y reducir los efectos de este virus. Entre las medidas generales que promueve la Organización Mundial de la Salud se encuentran lavarse las manos a fondo y con frecuencia, mantener una distancia mínima de un metro respecto de cualquier persona que tosa o estornude, evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca, permanecer en casa si no se encuentra bien de salud y mantenerse informado sobre la enfermedad a través de fuentes oficiales.
Adicionalmente, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) comparte algunas recomendaciones para la seguridad alimentaria en tiempos de coronavirus:
- Limpia tu cocina, comedor y otros espacios donde habitualmente preparas y consumes alimentos usando agua, jabón y solución a base de cloro.
- Mantén tus manos y antebrazos limpios cuando manipules y consumas alimentos.
- Almacena los alimentos de manera segura y a temperatura adecuada.
- Manipula con cuidado la carne y la leche para evitar la contaminación de alimentos no cocinados.
- Usa diferentes tablas de cortar para carne cruda y comida cocinada
- Cocina completamente la carne y los huevos.
- Lávate las manos antes y después de interactuar con animales y mantenlos alejados de las áreas de preparación de alimentos, como práctica general, aunque no hay evidencia de que ellos intervengan en la propagación del virus.
- Fortalece tu sistema inmunológico manteniendo una dieta suficiente, diversa, nutritiva e inocua, baja en grasas, azúcares y sal, y bebiendo mucha agua.
- Utiliza todas las partes comestibles de los alimentos en diferentes preparaciones, para que sean aprovechados los nutrientes que contribuyen a reforzar tus defensas y colabores con el #NoDesperdicio.
- Cuida especialmente la alimentación sana de infantes y adultos mayores.
- No participes en la elaboración de alimentos si tienes algún síntoma respiratorio.
- Planifica bien los alimentos que consumirás antes de comprarlos para evitar pérdidas y desperdicios y optimizar las visitas a mercados.
- No toques ni pases la mano por alimentos como carnes, frutas verduras y legumbres que no vas comprar o consumir.
- Realiza actividades físicas con frecuencia, incluso si debes pasar tiempo en casa.
- Consulta información oficial sobre la enfermedad y no contribuyas a diseminar datos falsos sobre los alimentos como fuente, vía de transmisión o protección ante la COVID-19.