Imagen ilustrativa
Por Pedro Martinez Pirez
Dos veces estuve en Paris y en ambas ocasiones gracias a invitaciones de la Embajada de Francia en Cuba.
La primera fue a propósito de mi programa de televisión de entonces, ANGULO ANCHO, en el cual di a conocer la deportación desde Bolivia del líder nazi Claus Barbie.
La Embajada francesa me invitó con mi esposa, la periodista Esperanza Alvarez Mercadal, quien ya jubilada aun labora en Radio Habana Cuba, pero preferí llevar conmigo a un camarógrafo de la televisión cubana que había estado conmigo en Ginebra, en la batalla cubana en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, y en Libia, en el juicio al presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, organizado por el Tribunal Antiimperialista de Nuestra América, presidido por el ex canciller guatemalteco Guillermo Toriello Garrido, uno de los fundadores de las Naciones Unidas y el único que se opuso al veto, por considerarlo antidemocrático.
Con Tomás Oliveros hice el primer viaje a Francia, y con él entrevistamos en el rio Sena a Alba de Céspedes, la nieta del Padre de la Patria cubana, Carlos Manuel de Céspedes, Alba, laureada escritora cubana nacida en Italia amiga de Fidel Castro y Celia Sánchez Manduley, quien vivía en la Isla San Luis, en el rio Sena,
Ella escribía su novela póstuma CON GRAN AMOR, dedicada a Cuba, para ser editada durante la Jornada de Solidaridad que se efectuaría en Paris, pero ella fallecio antes, en 1997.
La periodista cubana Maritza Deschapelles, del canal Educativo de Cuba, hizo con las dos entrevistas mías a Alba de Céspedes, un precioso documental que según me dijo la colega, será reproducido en estos días, cuando en Paris se realizan las Olimpiadas y muchos televidentes cubanos han visto en reiteración las imágenes del rio Sena y de la Torre Eiffel.
También en el río Sena, donde vivía en su yate, entrevistamos al excelente actor de cine Pierre Richard, quien nos brindó ron y habanos cubanos, que le acompañaron durante muchos años en la extensa vida del RUBIO ALTO DEL ZAPATO NEGRO.
Pierre Richard confeso en La Habana en 2018 su amor por Cuba durante la edición 21 del Cine Francés en la capital cubana.
Recuerdo que la invitación de los franceses fue porque en Paris se celebraba el Primer Encuentro Mundial de Presentadores de Televisión, donde Ignacio Ramonet, Director de Le Monde Diplomatic dijo que los periodistas de televisión habían perdido credibilidad por el nacimiento del uso del telepronter, en lo cual yo, admirador de la improvisación en radio y televisión estuve en plenamente acuerdo.
Ramonet ha estado en estos días en Caracas, invitado por el Canal TeleSur, para que observe las elecciones del 28 de julio en Venezuela.
Alba de Céspedes había nacido en Italia en 1911 cuando su padre era Embajador de Cuba en esa nacion europea. Yo la entreviste en dos ocasiones en su casa de la Isla San Luis, en el rio Sena, primero para la televisión y luego solamente para Radio Habana Cuba cuando volví a París el año siguiente, también invitado por la Embajada francesa, junto al Historiador de la Ciudad de La Habana Eusbio Leal Spengler, por el bicentenario de La Batalla de Valmy, decisiva para la preservación de la Revolucion Francesa.
Recuerdo que en el primer viaje a Francia entreviste también al profesor universatorio francés Paul Estrade, ganador del Premio JOSE MARTI DE LA UNESCO, me dijo que Martí era un hombre integral, donde se reunian la revolución, el independentismo, la poesía y el pensamiento de Nuestra América.
Nunca olvidaré la entrevista que también le hice al amigo Alfredo Guevara, quien era el representante de Cuba ante la Unesco y fue el único que reconocio que no se había hecho lo suficiente por preservar el enorme legado martiano, que llevó al presidente francés Yacques Chirac a prohibir la instalación en París de un busto de José Martí.
El colmo de esa primera visita a Paris fue el desconocimiento por los administradores de la Torre Eiffel de lo que había dicho el prócer cubano de ese gran símbolo de la capital francesa. EL MUNDO ENTERO VA COMO MOVIENDOSE EN LA MAR CON TODOS LOS PUEBLOS HUMANOS Y DEL BARCO DEL MUNDO LA TORRE ES EL MASTIL.