Ciego de Ávila, 13 oct (RHC) Bajo la premisa del gobierno cubano de que nadie quedará desamparado, tan pronto como llegó a la provincia, procedente de países amigos y organizaciones internacionales, comenzó la distribución gratuita de alimentos y artículos de primera necesidad en este poblado del sur avileño, muy afectado por el huracán Irma.

Las primeras familias en recibir el donativo fueron las que habitaban las 114 viviendas devastadas por el viento y la penetración del mar, lo cual dejó a los pobladores sin la mayor parte de sus pertenencias, en mayor grado en el barrio Palmarito.

Ante la presencia de Raúl Pérez Carmenate, vicepresidente del Consejo de Defensa Provincial, pobladores de la zona recibieron de manera organizada un kit de alimentos y de cocina, frazadas para taparse, agua embotellada, papel higiénico, confituras para niños y  útiles de primera necesidad.

Dévora Álvarez Valido, vicepresidenta del Consejo de Defensa en el municipio de Venezuela, dijo que en esta etapa se beneficiarán más de 200 damnificados, con prioridad para los asistidos (incluidas las 33 familias cuyos inmuebles fueron arrasados), las embarazadas, los niños y las personas encamadas.

La primera en recibir la ayuda fue Dania Pupo Anaya, residente en Palmarito y a quien el viento y la inundación dejaron sin hogar y pertenencias. «Estoy contenta. Yo estaba segura de que la Revolución no deja a nadie desamparado. Nos queda mucho trabajo, pero volveremos a levantar la casa», significó.

Con anterioridad, pobladores afectados por el huracán Irma en esta comunidad recibieron los primeros colchones y fogones de kerosene, de manera subsidiada. Otros territorios del norte avileño también recibirán este tipo de ayuda en horas posteriores.

En el caso de las personas damnificadas con destrucción total o parcial de sus domicilios, el Gobierno decidió que el presupuesto del Estado financie el 50 % del precio de los materiales.