La Habana, 11 ene (RHC) El plan de acciones de Cuba para protegerse del cambio climático en el próximo siglo resultó elogiado este 11 de enero por la revista Science, órgano difusor de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia.
En un trabajo periodístico, la publicación detalló los pormenores del proyecto denominado Tarea Vida, el cual tiene acciones previstas para los venideros cien años, confirma el reporte de la agencia Prensa Latina.
Entrevistada por Science, la bióloga marina Dalia Salabarría, del Centro Nacional de Áreas Protegidas (CNAP), comentó que la idea general de la tarea es aumentar la resiliencia de las comunidades vulnerables.
La especialista consideró que Cuba debe actuar rápidamente para la prevención de futuros desastres.
Sobre el financiamiento de esas acciones, el jefe de la división de medio ambiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba (CITMA), Orlando Rey Santos, añadió que el gobierno pretende gastar al menos 40 millones de dólares en dicho plan, este año, y se ha dirigido a donantes extranjeros en busca de ayuda.
"Además, un equipo de expertos hará una propuesta de cien millones para presentar en 2018 al Fondo Mundial para el Clima, un mecanismo de financiamiento internacional establecido en virtud de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático", sostuvo el funcionario del CITMA.
Igualmente destacó que Italia fue la primera nación en responder, prometiendo 3,4 millones de dólares a la iniciativa en noviembre de 2017.
Por otra parte, el científico marino David Guggenheim, presidente de Ocean Doctor, una organización sin fines de lucro en Washington, calificó a Tarea Vida de un proyecto increíble, pues destaca por tener una visión a largo plazo ya que tiene la intención de preparar a la isla para los impactos climatológicos en el próximo siglo.
Resaltó que Cuba es un país donde se respetan a sus científicos, "y su política de cambio climático está impulsada por la ciencia", acotó.
La Tarea Vida, aprobada en abril de 2017 por el Consejo de Ministros de Cuba, entre otras medidas prohíbe la construcción de nuevas viviendas en áreas costeras amenazadas, y ordena la reubicación de personas de comunidades condenadas por el aumento del nivel del mar.
El programa, además, apuesta por una reforma del sistema agrícola del país para desplazar la producción de cultivos de las áreas contaminadas con agua salada, y explica la necesidad de apuntalar las defensas costeras, incluida la restauración del hábitat degradado.