La Habana, 23 jul (RHC) La posibilidad de una ola de calor en Cuba en las próximas jornadas fue descartada por un especialista del Centro del Clima del Instituto de Meteorología de la isla, destaca hoy el diario Granma.
El predominio de sensaciones térmicas muy cálidas se refiere a situaciones atmosféricas particulares de las latitudes medias y zonas continentales, cuando las temperaturas alcanzan valores por encima de los 40 grados Celsius, dijo al rotativo Ramón Pérez, investigador de la institución científica.
Tal realidad, unido a la baja humedad reinante, provoca la muerte de seres humanos por deshidratación y otras causas, explicó.
En particular Cuba, por su condición insular, hace improbable tales eventos, pues la brisa marina siempre será un factor atenuante para no registrar escenarios tan extremos, a lo cual se suma el usual refrescamiento de la atmósfera causado por las típicas lluvias de las tardes veraniegas, apuntó Pérez.
Según el experto, el concepto de ola de calor no solo depende del comportamiento de las temperaturas, sino del impacto que ocasionan.
Al comparar lo sucedido en anteriores veranos, manifestó que en junio no hubo ningún record de máxima absoluta, mientras la media mensual estuvo muy cerca de la norma con una anomalía de 0,2 grados Celsios por debajo de la habitual.
Tampoco, añadió, en las dos primeras decenas de julio hay reporte alguno de nueva primacía de máxima. El mayor registro notificado hasta esa fecha es de 37,3 grados, en Veguitas, Granma, el día 17, expresó.
En el séptimo mes del calendario del 2015 se establecieron 11 record de calor, recordó.
Aunque el actual periodo estival en Cuba permanece dentro del rango de lo normal, entre 1951 y el 2010 la temperatura media en la etapa aumentó en 0,8 grados Celsius, lo que confirma la tendencia hacia un clima más cálido en este país, señaló.
Esa situación nos conduce de manera progresiva hacia valores extremos de calor con el paso de los años, pero al menos por ahora nuestra condición insular nos protege de las llamadas olas, concluyó.