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La Habana, 12 oct (RHC) Al acceder, hace más de 50 años a las primeras imágenes satelitales, Cuba reafirmó su propósito de elevar el Servicio Meteorológico nacional a un lugar preferente y comparable al de países desarrollados.

Así lo reafirmó Luis Enrique Ramos, coordinador de la Comisión de Historia de la Sociedad Meteorológica de Cuba, en su artículo Cuatro decenios de imagenología satelital en la Meteorología cubana.

Ramos, rememoró en varios de sus estudios, la fundación del Instituto de Meteorología de Cuba (Insmet), el 12 de octubre de 1965, hace ya 58 años, que consolidó la vigilancia ante desastres naturales para la protección de las vidas humanas y bienes materiales, fundamentalmente en el sector turístico y económico.

En su artículo “Un comentario en torno al 55 aniversario del Insmet”, el investigador estableció los orígenes de la institución hacia 1963, cuándo el huracán Flora devastó la región oriental de la nación caribeña, con saldo de mil 157 víctimas mortales y 175 mil damnificados. Meses después, azotó el huracán Cleo.

Todos estos antecedentes, apremiaron a fortalecer el Servicio Meteorológico Nacional, para lo cual se indicó planear, organizar y fundar el Instituto de Meteorología, tarea que le fue encomendada al doctor Antonio Núñez Jiménez (1923-1998).

El Insmet, perteneciente a la Agencia de Medio Ambiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), “fue resultado de un proceso de integración, en el que convergieron diversos organismos y entidades, concebido para renovar la ciencia meteorológica, con un enfoque metodológico transformador”, rememoró el investigador.

Ramos destacó además la colaboración científica establecida con la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, que apoyó con equipamiento técnico para la creación de las primeras estaciones meteorológicas.

En la actualidad, el servicio meteorológico nacional cubano cuenta con 68 estaciones y 14 centros provinciales, con la sede central, situada en la colina de Casablanca en la capital cubana. Lo integra también una red, conformada por ocho radares, que cubren todo el archipiélago y mares adyacentes.

Muchos han sido los momentos cruciales en el trabajo del Instituto, en estos 58 años. Sus fundadores recuerdan entre ellos: la primera foto del satélite meteorológico recibida en marzo de 1969 o el viaje de especialistas cubanos al centro del Huracán Gilberto en septiembre de 1988.

Más allá de su conocida misión en el pronóstico diario del tiempo y el seguimiento a huracanes y otros fenómenos tropicales, la institución también asume acciones de investigación y desarrollo en áreas tales como las causas de la sequía en Cuba, el impacto del cambio climático en el archipiélago, la salud humana y animal, entre otros.

Lo que sí constituye un pronóstico certero es que, el Sistema Meteorológico Nacional y especialmente el Insmet están preparados para enfrentar todo tipo de contingencia, lo cual es validado por décadas de experiencia, aplicando la ciencia en favor de la sociedad. (Fuente: Prensa Latina).