Dentro de la primera fase de la mayor obra constructiva que realiza la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey (OHCC), ubicada al centro-oriente cubano, el paseo exhibe dos de las más antiguas locomotoras del país, con fecha de fabricación de 1882 y 1890.

Con marcado carácter comercial, el tramo que colinda con el Hotel Plaza, brinda servicios de cafeterías, responsabilidad de la Empresa Provincial de Turismo de Ciudad Santa María, entidad que a inicios de año abrió un inmueble, que pretende convertirse en la Casa del Habano de Camagüey, también ubicada en el área patrimonial.

El espacio también resulta atractivo para visitantes foráneos, provenientes especialmente de Canadá, Francia, Italia, Rusia y Estados Unidos, atraídos por la cultura local.

Además del carácter comercial, la obra tiene como objetivo divulgar la influencia histórica y cultural que tuvo el ferrocarril en la región, surgido en la primera mitad del siglo XIX, cuando el trayecto Puerto Príncipe a Nuevitas se convirtió en el séptimo en la mayor de las Antillas, gracias a Gaspar Betancourt Cisneros.

Con la operación constructiva se rescatan valiosos exponentes arquitectónicos, documental e industrial; un accionar que contribuye a su vez a la preservación del patrimonio intangible de la urbe.

Elementos tradicionales urbanísticos como adoquines que datan de hace más de un siglo, caracterizan el espacio, que cumple con todos los requisitos en su ambientación, con sistemas de luces y aditamentos para convertirse en el paseo preferido por los transeúntes de la urbe, fundada en 1514.