La Habana, 31 agos (RHC) Una de las precursoras del movimiento feminista en Cuba, la suiza Enriqueta Favez, inspiró al artista José Villa Soberón, quien termina una escultura dedicada a esta insigne mujer.
El proyecto financiado por la Embajada de Suiza en la nación caribeña fue impulsado por Olivier Praz y el historiador cubano Julio César González Pagés, autor del libro Por andar vestida de hombre, publicado en 2012 por la Editorial de la Mujer.
Junto a las imágenes de la escultura, González Pagés, refirió en su perfil de Facebook, el impacto de la historia de Favez, quien a raíz de su investigación ha logrado inspirar a increíbles artistas 'que también convirtieron en suya esta historia'.
Entre ellos resaltan Fernando Pérez y Laura Cazador con la película Insumisas, Rolando Almirante con el documental Enriqueta y Adela y la canción Libertad disfrazada de Tanya.
Gracias Favez por propiciar la amistad con el maestro Soberón que ya nos regaló una escultura que inmortalizara nuestra Enriqueta, el muy talentoso artista de Santiago de Cuba, está finalizando una interpretación escultural de esta médica suiza (1791-1856) que trabajó en el ejército de Napoleón y luego en Baracoa, Cuba, publicó González Pagés.
La investigación que dio paso al libro, inició en la década de 1990, mientras el también antropólogo buscaba información sobre las sufragistas, encontró el archivo del caso de Enriqueta a la que simplemente se le juzgaba por andar vestida de hombre.
Tras 16 años de indagación y cierta incomprensión, el texto vio la luz y reivindicó a una figura que desafió el poder hegemónico y de la que prácticamente nada sobrevive, ni siquiera su cadáver, pues el cementerio donde estaba enterrada en Nueva Orleans fue dañado por el huracán Katrina, en 2005.
'No hay ni una tarja que la recuerde, ni frente a la puerta de su casa natal en la ciudad suiza de Lausana, ni en ninguno de los tantos lugares por los que pasó alguna vez', aseguró el autor del libro.
Villa Soberón, Premio Nacional de Artes Plásticas en 2008, es autor de una veintena de esculturas monumentales, emplazadas en ciudades de Cuba, España y México, sus obras de pequeño formato forman parte de importantes colecciones de una veintena de países y destaca por su trabajo docente. (Fuente: Cubasi).
