Moscú, 31 mar (PL) Rusia fue invitada por la Unesco para participar en un proyecto de restauración de la ciudad antigua de Palmira, en el desierto sirio, destruida parcialmente por los terroristas del Estado Islámico (EI).
La portavoz de la cancillería, María Zajarova, comunicó hoy en rueda de prensa que Moscú recibió un proyecto de memorando de entendimiento referido a la colaboración en los temas de conservación y restauración del patrimonio sirio.
Conocida como la perla del Oriente Medio y la reina del desierto sirio, Palmira fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1980 por la Oficina de Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Esa ciudad sufrió la ocupación en mayo de 2015 por los grupos armados del EI y otras agrupaciones terroristas, y gran parte de la herencia cultural monumental resultó destruida total o parcialmente, unido al saqueo de valiosas obras de arte de la antigüedad.
Zajarova indicó que su país evalúa el proyecto de memorando, cuya firma sería en fecha próxima en la sede de la Unesco, en París, agregó.
Al subrayar la importancia de la liberación de Palmira el domingo último, la vocera de la cancillería llamó la atención de que el estado destructivo de la antigua ciudadela corrobora que en el sitio actuaron los terroristas y no la denominada oposición moderada. Lamentó sin ambages que Occidente no mostrara interés en la liberación de Palmira, clave en la salida hacia otras ciudades sitiadas y a Raqqa, autodeclarada capital del Estado Islámico.
El bloqueo en el Consejo de Seguridad de la ONU de un saludo por la liberación de Palmira "demuestra que Occidente lucha contra los terroristas partiendo de la coyuntura política", aseveró la diplomática.
Se refirió asimismo a los intentos de minimizar el papel de los esfuerzos de Damasco y Moscú en la lucha contra el terrorismo.
Tras conocerse la noticia sobre la derrota definitiva de los terroristas en Palmira, el presidente Vladimir Putin felicitó a la directora general de la Unesco, Irina Bókova, a quien prometió la ayuda de Rusia en la recuperación de los monumentos.
Militares rusos participarán igualmente en la retirada de artefactos explosivos sembrados por el Estado Islámico y otros grupos terroristas en esa ciudad