BARCELONA, 13 Oct 2016 (AFP) - El delantero brasileño del FC Barcelona, Neymar, cuyos estéticos regates rayan la provocación, según sus detractores, aseguró que no "cambiará" su manera de jugar, una semana después de recibir un golpe a manos de un jugador de Bolivia que le dejó el rostro ensangrentado.
"No voy a cambiar. (Los rivales) Deben saber que cuando salto al terreno de juego, hago mi juego y mi juego es así, regatear, marcar goles y crear ocasiones con mis compañeros", declaró el extremo del FC Barcelona durante un evento publicitario.
"Soy feliz jugando así", añadió.
Autor de un gol y de dos pases de gol el jueves pasado en el duelo ante Bolivia (5-0) en las eliminatorias para el Mundial-2018, Neymar recibió un codazo del delantero Yasmani Duk que le obligó a salir con la cara cubierta de sangre.
Su estilo de juego le ha costado broncas con sus rivales en España, que estiman que el brasileño realiza gestos técnicos innecesarios. "Él juega así, guste o no", le defendió el mes pasado su entrenador, Luis Enrique.
Preguntado sobre la entrega del próximo Balón de Oro, para el que el portugués Cristiano Ronaldo es favorito, Neymar se decantó por su compañero Leo Messi.
"Messi es importante para el fútbol, para el Bar a y para Argentina. Argentina tiene un gran equipo y volverá a ganar seguro, Leo es muy importante para nosotros... ¿El Balón de Oro? Para mí sigue siendo el mejor Leo, es quien juega mejor", estimó el brasileño de 24 años.
"Para ser el mejor del mundo no tengo prisa", explicó el delantero del Bar a
De vuelta de la concentración con su selección, Neymar estará en el partido del Barcelona el sábado ante el Deportivo de La Coruña (14h15 GMT).