por Lemay Padrón Oliveros
Una vez concluida la Serie Nacional 56 en su fase clasificatoria, llega la hora esperada por todos, la de la postemporada, pero esta vez habrá una antesala con la selección de otros tres refuerzos para cada novena involucrada, una velada que pudiera ser crucial en las aspiraciones de cada uno de alzar el trofeo el próximo mes.
Si los primeros refuerzos fueron importantes, estos pudieran serlo aún más, porque ya se piensa solamente en dos topes bilaterales pactados a siete desafíos, donde la dinámica de juego varía bastante con respecto a la campaña regular.
Quiero entonces jugar con la posibilidad de multiplicarme en la mente de cada manager y ponerme en su lugar, para ver qué pediría llegado el caso. En las dos primeras rondas no hay mucho problema, porque ya están definidas, pero la tercera será por sorteo.
Pues bien, si yo fuera Víctor Mesa mi primera selección sería Liván Moinelo. Pese a no haber estado este año en su mejor forma, es el mejor relevista de la pelota cubana, tanto en funciones de cerrador como de preparador o como relevista largo, y un hombre con nervios de acero, ideal para la postemporada.
De ahí en adelante creo que los otros tres también escogerán lanzadores, y aunque varíe el orden, deben estar entre Erly Casanova, Noelvis Entenza, Danny Betancourt, José Ramón Rodríguez y Yunier Suárez.
Como se ve, quedarían algunos para la segunda vuelta, y si alguien necesita más ofensiva es Vladimir Hernández, por lo que el jardinero Julio Pablo Martínez se pinta solo.
Si yo fuera Carlos Martí saldría por otro serpentinero, pero Roger Machado puede, en dependencia de lo que quede, luchar por otro patrullero.
La última ronda a mi juicio será la de los jugadores de posición, y entonces Matanzas pudiera adquirir a un receptor, Ciego a un jardinero de poder (Frederich Cepeda se pinta solo), y Villa Clara y Granma a torpederos (Alexander Ayala y Yordan Manduley).
En el caso del receptor de Matanzas se habla de Olber Peña, Rafael Viñales o Yordanis Acebal, porque son los que están en la lista brindada por la Comisión Nacional, pero la nota dice que esos son los peloteros de “interés”, no que tenga que escogerse de ese listado forzosamente, y ahí me acuerdo de Eriel Sánchez, que ya jugó con Matanzas, o sea, que conoce a buena parte del staff, y es un bateador probado en momentos difíciles. Si está saludable me iría con él.
Por supuesto, todo esto queda en el “si yo fuera…”, cada uno de ellos tendrá sus criterios, y ustedes los lectores también habrán sacado sus cuentas.
(CubaSí)