La Habana, 10 may (EFE).- El ex saltador de altura Javier Sotomayor y la excorredora Ana Fidelia Quirot, dos leyendas del atletismo cubano, manifestaron a Efe su postura contraria a la propuesta de la Asociación Europea de Atletismo de borrar todos los récords mundiales anteriores al año 2005 por sospechas de dopaje.
'Me siento un poco mal como muchos deportistas, es como borrar la historia de lo que se ha hecho y olvidarse de récords mundiales y hasta del Salón de la Fama', declaró a Efe Javier Sotomayor en entrevista telefónica.
Sotomayor, de 49 años, conocido como el 'Príncipe de las Alturas', se retiró del deporte activo en 2001 y acumuló en su carrera tres récords mundiales: 2,33 metros en 1984 (actual récord de la categoría sub 17 cadetes), 2,43 metros (bajo techo, 1989) y el de 2,45 (al aire libre, 1993, Salamanca), la marca universal vigente.
También posee dos medallas olímpicas, conseguidas en Barcelona'92 (oro) y Sydney 2000 (plata).
La propuesta de la Asociación Europea pretende que solo se reconozca un récord si se logró en una competición internacional debidamente avalada, si el atleta se sometió a controles antidopaje en meses previos y si la muestra fue guardada durante 10 años para posteriores comprobaciones.
La decisión definitiva sobre la propuesta se conocerá cuando se reúna el consejo de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés) previamente a los Mundiales de Londres, previstos del 3 al 13 de agosto próximos.
Para Sotomayor, considerado el más grande saltador de altura de todos los tiempos, aprobar la anulación supondría 'poner en entredicho el trabajo de tantos atletas, entrenadores y directivos del atletismo en el mundo'.
'¿Habrá entonces que borrar todos los récords nacionales y continentales? Es prácticamente borrar la historia del atletismo y entregar nuestras medallas sin prueba alguna. Si hay tantas dudas, habría que hacer un nuevo Salón de la Fama', señaló Sotomayor.
Otra figura del atletismo cubano, la excorredora Ana Fidelia Quirot, conocida como la 'Tormenta del Caribe', declaró a Efe su desacuerdo con la aprobación de una medida que anularía marcas solo porque son sospechosas de que ha existido un acto de dopaje.
'¿Y los atletas que nunca se han dopado, que siempre han jugado limpio? Es muy duro que a los atletas que nunca se hayan dopado les quiten sus récords', sostuvo Quirot, quien en 1989 logró dos títulos en la Copa del Mundo, en 400 y 800 metros, por lo que fue elegida como la mejor atleta femenina del planeta.
'No estoy de acuerdo. Si tienen sospechas, que sean más severos y rigurosos a partir de ahora y tomen medidas con los atletas que se dopan de por vida', subrayó la medallista de bronce en los Juegos de Barcelona en 1992.
Quirot, que también fue campeona del Mundial de Atletismo en Gotemburgo (Suecia) en 1995, en los 800 metros planos con un tiempo de 1,56 minutos, la mejor marca personal y récord de Cuba, el dopaje es 'un flagelo del deporte', pero 'si no se tienen pruebas no se deben borrar marcas'.
'La comercialización del deporte cada vez es mayor y eso ha conducido al dopaje', dijo la también campeona del mundial de Atenas (Grecia) en 1997. EFE