La Habana, 29 jul (RHC) El duelo más célebre del fútbol mundial actual, Real Madrid - Barcelona, vivirá este sábado en Miami su episodio 267.
Por primera vez ambos equipos se enfrentarán en Estados Unidos en un torneo de pretemporada con aroma a Champions League.
Josep María Bartomeu, presidente del equipo azulgrana, lo llama el "clásico amistoso". La leyenda mexicana Hugo Sánchez, ex goleador histórico de los merengues, en cambio, se decanta por el "clásico global".
La más reciente ocasión que ambos se enfrentaron fuera de España, Real Madrid se impuso 1-0 a su rival en mayo de 1982 en Venezuela.
A pesar de que el Real Madrid no podrá contar con su máxima estrella –Cristiano Ronaldo sigue de vacaciones– se han vendido todas las entradas para ver a los astros Neymar, Lionel Messi, Luis Suárez o Gareth Bale.
Este clásico, organizado por la sociedad Relevent Sports, propiedad de Stephen Ross, a la cabeza también de los Delfines de Miami, es un asunto de dinero. "Es una buena operación en términos de negocio para los dos equipos", confirmó el presidente del Barça, Bartomeu, en entrevista al New York Times aparecida el jueves, sin mencionar cifras.
El partido es tan esperado como si fuera una final del Supertazón. Relevent Sports ha gastado unos dos millones de dólares para realizar eventos que incluyen fiestas en la lujosa VIP South Beach y partidos de futbol entre famosos.
Se espera que el Hard Rock, estadio de los Delfines, llene sus 65 mil localidades y el sitio web de reventa de entradas StubHub asegura que el encuentro será el partido de futbol más popular de la temporada con precios que alcanzan los 5 mil 500 dólares por asiento.
Ya que es una cuestión de millones, este duelo enfrenta a dos de los actores principales de un mercado de traspasos en plena ebullición: el FC Barcelona podría ver cómo Neymar se marcha al París Saint-Germain por 222 millones de euros, mientras Real Madrid busca contratar a la nueva figura francesa, Kylian Mbappé, valorado por el Mónaco en unos 180 millones de euros.
Por si fuera poco, se trata del primer clásico de Ernesto Valverde como técnico del conjunto catalán, y enfrente tendrá a Zinedine Zidane, leyenda blanca como jugador y como entrenador tras haber ganado la reciente Liga de Campeones. (Fuente/La Jornada)