Londres.- ¿HEROÍNA o decepcionada? Es la pregunta de muchos sobre cómo despedirá esta noche la cuatrocentista estadounidense Allyson Felix, retada a conquistar su medalla número 14 en Campeonatos Mundiales de atletismo.

El primero de los calificativos inclina la balanza de los vaticinios, pues pocos dudan que la increíble norteña (49.65 en la temporada) ceda protagonismo pese a la oposición de la bahamesa Shaunae Miller-Uibo (49.77), quien ya le ganó en Río 2016, y su compatriota Phylis Francis (49.96).

Lo cierto es que la también seis veces dorada olímpica tiene inspiración de sobra para regalarse la carrera de su vida. Reinar elevaría a 10 su total de tronos, que sumados a tres platas y un bronce totalizarían 14 preseas.

Igualaría entonces la cosecha exhibida por la jamaicana Marlene Ottey, máxima premiada a este nivel, aunque solo tres de esos premios fueron recibidos en el centro del estrado.

Si consigue su décimo título, Felix estaría a solo uno del legendario jamaicano Usain Bolt, quien no pudo aumentar aquí su saldo en los 100 metros planos, pero estará en el relevo 4x100.

A la estadounidense también le quedarían otras opciones, pues está anunciada para las dos postas (4x100 y 4x400),  especialidades en las que más cetros acumula.

La verdad se conocerá con la última prueba de un miércoles que incluye igualmente los 400 metros con vallas entre hombres, con el atractivo de ver al estadounidense Kerron Clement en busca de su tercer título del planeta.

ALGO MÁS DE ESTADÍTICAS

Pocos deportes como el campo y pista para “llenarnos” de estadísticas, comparaciones y datos curiosos.

Veamos uno de estos últimos: el atleta más longevo inscrito en la presente justa es el suizo Alejandro Francisco Florez, quien con 46 años y 94 días participará el domingo en la marcha de 50 kilómetros.

Y en coincidencia será ese propio evento, pero entre mujeres, el que reciba a la “menos joven” del certamen: la estadounidense Susan Randall, de 42 años y 341 días.

Por cierto Estados Unidos concursa aquí con la delegación más numerosa, conformada por 136 integrantes, y son 86 los países con apenas un competidor.

Un total de 33 campeones de hace dos años vinieron a defender sus lauros y suman 31 los líderes de Río de Janeiro 2016, cifras que hablan solas de la calidad reunida.

Hasta el momento 31 naciones ocupan espacios en tabla de medallas, pero todavía está por verse si se supera el total de 46 alcanzado en Osaka 2007.