Semenya, quien el pasado jueves conquistó en Bruselas su tercer diamante consecutivo en los 800 metros, nunca antes había corrido tan rápido la modalidad del kilómetro.

La africana rebajó en más de tres segundos el anterior mejor registro de la temporada, en poder de la británica Laura Muir con una crono de 2:33.92 minutos desde el pasado 18 de agosto.

De hecho, los 2:30.70 minutos de Semenya en el estadio olímpico de Berlín son la quinta mejor marca de todos los tiempos, eso sí, muy lejos de los 2:28.98 de la rusa Svetlana Masterkova como récord del mundo desde 1996.

El mitin sirvió para despedir del deporte activo al discóbolo alemán Robert Harting y al velocista Kim Collins, de San Cristóbal y Nieves.

Harting, de 33 años, cerró su carrera con un segundo puesto, sólo por detrás de su hermano Christoph. Se despidió con un lanzamiento de 64.95 metros ante el aplauso de 45 mil 500 personas.

El germano ganó la corona olímpica en Londres-2012, además de tres oros mundiales y dos más a nivel europeo.

También dijo adiós Collins, el caribeño de 42 años acabó hoy octavo en los 100 metros con un tiempo más que discreto, 10.45 segundos.

Collins conquistó el hectómetro en el Mundial de París-2003 y su récord personal de 9.93 lo consiguió en el 2016, cuando ya tenía 40 años.

En la cita olímpica de Londres-2012 protagonizó uno de los episodios más curiosos de su carrera, ya que el Comité Olímpico de su país le suspendió por haber pasado una noche fuera de la Villa. Aquella noche durmió en un hotel con su mujer, que entonces era también su entrenadora.