“Yo sigo ahí con ellos, trato de darles una mano y espero que en un futuro se clasifiquen para los Juegos Olímpicos,” dijo Simón, uno de los mejores centrales del mundo, en una entrevista al portal especializado argentino Somos Vóley.
No obstante, el jugador la Lube Civitanova de Italia, de 32 años y 2.08 metros ve difícil su llegada a París-2024.
Luego de una década triunfal en ligas extranjeras, el bloqueador regresó a la selección de Cuba el pasado año y bajo su inspiración el equipo quedó a un paso de clasificarse para Tokio-2020.
Antes había jugado por última vez con la selección en el mundial de Italia-2010, donde Cuba asombró al ganar el subtítulo.
Destacó que lo primero que puede aportar (al equipo cubano hoy) es “la experiencia ganada en Europa, Brasil y Corea”, ligas en las que fue protagonista y se llenó de gloria.
“En Cuba lo que falta es la experiencia de trabajo, como integrarse en el voleibol moderno”, acentuó y dijo que ayuda explicando cómo programar y cómo se deben hacer “cosas que faltan”.
Con una talentosa generación de figuras como Marlon Yant (Lube), Miguel Angel López (Sada Cruzeiro), Osniel Melgarejo (Bolívar), Roamy Alonso (Chaumont) y Miguel David Gutiérrez, el experimentado central ve un futuro alentador en el voleibol cubano.
Consideró que Yant (de 18 años y su futuro compañero en la Lube) tiene “bastantes” condiciones para ser la nueva estrella cubana, pero dejó claro que “todo depende de él”, de su empeño”.
Dijo además que en el equipo hay ahora “varios muchachos interesantes con calidad y pueden llegar al alto nivel tranquilamente”.
Recordó que su regreso a la selección tras una década fuera fue “algo bonito” a pesar de no haber logrado el objetivo de clasificarse para Tokio, ya que muchachos que no conocía lo acogieron como si fuera “uno más”.
Simón es uno de los jugadores más laureados del voleibol, con triunfos a nivel mundial tanto con el Sada Cruzeiro como con la Lube Civitanova.
La última temporada lo ganó todo con la Lube: la Liga Italiana, la Copa de Italia, la Liga de Campeones de Europa y el Mundial de Clubes.
Expresó que extraña “todo” de Cuba y consideró que haber vivido en la isla parte de su juventud le dio una buena formación humana.
“De Cuba lo extraño todo. La familia, los jugadores que llegamos a ser como una familia, los amigos, así como ver 15.000 personas reunidas en un estadio para vernos jugar.
Voy de vacaciones cada año y el 11 de junio hacemos una fiesta para celebrar mi cumpleaños. Si no se puede esta vez el 11, festejaremos más adelante”, indicó a Somos Vóley.
Simón describió a los cubanos como “apasionados” y opinó que los deportistas destacan por su “talento y garra”. “Somos fuertes en atletismo, boxeo, lucha y varios deportes. Y si somos fuertes es que tenemos bastante calidad humana”, recalcó.
