La Habana, 17 jul (PL) A sus 62 años, la cubana María Caridad Colón recibe entre sonrisas la noticia: fue elegida hoy como miembro del Comité Olímpico Internacional (COI) y la designación devuelve al momento del lanzamiento de la jabalina que la inmortalizó en Moscú 1980.
Puede decirse mucho sobre Colón, pero si hay algo claro es que su andar está ligado al ámbito olímpico y que el mes de julio merece un espacio importante en su historia, tan abultada como su palmarés deportivo.
Las fechas no fallan: un 25 de julio logró aquel disparo de 68,40 metros que la colocó en el centro de un podio de premiaciones bajo los cinco aros y este día 17 la regresa al contexto atlético de mayor alcurnia, aunque con tarea y visión diferentes, si bien posee el mismo compromiso de cumplir las expectativas asignadas.
Aquella medalla de oro cambió el sentido de todo -dijo la nacida en la oriental provincia de Guantánamo-; todo inició hace 40 años y cada vez me trae más alegrías, como esta que acaba de ocurrir, afirmó en declaraciones exclusivas para Prensa Latina.
Con restos de nerviosismo en su rostro, la antillana, primera mujer de América Latina y el Caribe capaz de colgarse una presea dorada olímpica, reconoció el honor que supone integrar las filas del COI, tras ser seleccionada en la 136 Asamblea de esa entidad, celebrada por vía telemática.
Son sueños cumplidos, de esos que uno siente como imposibles, y deviene resultado de décadas ligadas al deporte, añadió mientras lucía la bandera cubana perfectamente bordada en el lado derecho de un pullover azul.
Colón, al parecer, es una amante de las primeras veces: antes como reina, luego de tocar la gloria en Moscú, y ahora al iniciar la lista de mujeres de la mayor de las Antillas en el seno del COI.
Ella seguirá los pasos de sus compatriotas Porfirio Franca y Álvarez de Campa, entre los años 1923 y 1938, Miguel Ángel Moenck (1938-1969), Manuel González (1973-1993) y Reynaldo González (1995-2015), quienes anteriormente ocuparon puestos en el máximo organismo del deporte mundial.
Tras el nombramiento, la exjabalinista ya cuenta con parte de su estrategia y una de las prioridades será apoyar la región latinoamericana, misión que vive de cerca dado el trabajo de Cuba en este ámbito en decenas de naciones. Mantendré ese objetivo y defenderé los intereses de nuestros países, a los cuales llevo en el corazón.
Además, recalcó, planea ser protagonista activa en la lucha por la igualdad de género, un designio que lleva adelante la institución, y que ella conoce de cerca después de formar parte de disímiles proyectos y eventos nacionales e internacionales.
Es un tema actual y creo que uno de los puntos claves de mi elección fue precisamente contar con más presencia femenina. Ese es uno de mis propósitos, tengo claro que defenderé como siempre los derechos de la mujer.
Como miembro del organismo olímpico, Colón ahora es una voz autorizada para abordar temas referentes a la aplazada edición Tokio 2020. Todavía es muy pronto para dar una valoración absoluta. El COI está decidido a hacer realidad la justa y sería algo muy grande, incluso con un sistema organizativo diferente. Mi deseo es que se pueda dar la inauguración.
Doble monarca panamericana en San Juan 1979 y Caracas 1983, la exatleta entiende el actual contexto global. El mundo está viviendo un momento difícil. No sabemos qué pasará mañana y todo sucedió en el año de los Juegos Olímpicos. Pero lo importante es que los deportistas y la población gocen de buena salud y podamos vencer esta etapa de pandemia.
Ahora, además de Colón, con 88 votos a favor y uno en contra, también tuvieron el privilegio de ingresar las filas del COI la croata Kolinda Grabar-Kitarovic (86-3), la saudí Reema Bandar Al-Saud (86-3), el mongol Battushig Batbold (68-16) y el británico Sebastian Coe (77-10), actual presidente de la Federación Internacional de Atletismo.
