Amplificada y fuertemente criticada en redes sociales, la celebración habría comenzado el 24 de diciembre (Navidad) y está prevista que termine solo el 1 de enero.

El delantero del club Paris Saint-Germain tiene una residencia en Mangaratiba, localidad del sur de Río, donde ordenó preparar un local subterráneo con aislamiento acústico para evitar molestar a los vecinos, según las fuentes.

Tal recinto es alquilado para la fiesta, pues la propiedad del jugador está en renovación.

De acuerdo con el portal de noticias UOL, Neymar prohibió los teléfonos móviles en el evento, para evitar que las imágenes de la alocada parranda circularan en plataformas digitales.

Entre las atracciones que contrató (o convenció) la estrella deportiva, de 28 años, aparecen los famosos músicos Léo Santana, Ludmila, Grupo Menos é Mais, Harmonia do Samba e Wesley Safadão.

También generó críticas en redes sociales otro evento de fin de año realizado por el influencer Carlinhos Maia. En el festejo, 47 empleados se registraron infectados por el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19.

La fiesta de Neymar se celebra cuando Brasil reporta hasta la fecha 190 mil 795 muertes y siete millones 465 mil 806 infectados por el patógeno.