Buenos Aires, 10 dic (RHC) La XI Cumbre Ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC) arrancó aquí con tres mil 500 delegados de 173 países, en medio de fuertes medidas de seguridad.

Con sede por primera vez en esta nación austral, la cita es inaugurada por el presidente argentino Mauricio Macri y el director general de la OMC, Roberto Azevêdo, en el Centro de Exposiciones y Convenciones, y se esperan días agitados en la capital hasta el próximo miércoles, jornada final de la cita.

La reunión, con una frecuencia bianual, centrará sus debates en temas cruciales de la agenda comercial en busca de afianzar posiciones respecto a las inversiones y el flujo de intercambio comercial entre diversos países, entre otros asuntos.

Se espera que en la agenda estén temas latentes como la eliminación de restricciones para bienes como los subsidios agrícolas, la pesca y la participación de las pequeñas y medianas empresas.

De forma paralela a la Cumbre se realizarán varios encuentros, entre ellos un Simposio de Comercio y Desarrollo Sustentable, el Foro Empresarial del Ministerio de Producción de la Nación y la Misión Parlamentaria Internacional.

Las autoridades desplegaron un gran operativo de seguridad en las distintas sedes como el Centro Cultural Kirchner (CCK), y los hoteles Hilton y Sheraton, con enormes vallados para evitar protestas.

Precisamente, y como ya es tradicional, diversas organizaciones sociales encabezarán una contra cumbre, la de los pueblos, para rechazar los Tratados de Libre Comercio (TLC), entre otras cosas.

Según precisaron los grupos nucleados en el movimiento Confluencia Fuera OMC, planean una semana de acción con foros y otras iniciativas en las que participarán invitados de todo el mundo y hoy, coincidiendo con la jornada inaugural, encabezarán una movilización desde la Plaza de los Dos Congresos al emblemático Obelisco porteño.

con informacion de prensa latina