Addis Abeba, 28 abr (RHC) Las langostas del desierto destruyeron más de 3,5 millones de quintales de productos agrícolas en Etiopía, y generó una crisis de seguridad alimentaria.
El ministro de estado para la Agricultura, Sani Redi divulgó que la plaga afectó 198 mil hectáreas de tierra donde habían sembradas grandes cantidades de maíz, sorgo y trigo, dijo Redi.
Han sido afectadas, informó, 170 woredas (circunscripciones) en seis estados regionales y una administración de la ciudad, en circunstancias muy complejas para eliminar estos insectos porque los trabajadores corren el riesgo de enfermar de Covid-19.
La nación, comentó, puede perder alrededor del ocho por ciento de los productos agrícolas el próximo año etíope debido a esa enfermedad y al azote de las langostas del desierto, lo cual obliga a proyectar una estrategia para atenuar ese déficit.
Asimismo, informó que, según pronósticos, los enjambres dañarán la agricultura del país africano al menos hasta el próximo mes de octubre y las pérdidas podrían aumentar a pesar de los esfuerzos económicos para evitarlo.
Conocidas también como tucuras, saltamontes o chapulines, las langostas pertenecen a los acrídidos, familia de insectos ortópteros caracterizados por su facilidad para migrar y reproducirse, que forman plagas capaces de acabar con la vegetación en grandes extensiones de tierra.
Un enjambre pequeño logra viajar 150 kilómetros diarios y consume cada jornada la misma cantidad de productos agrícolas con los cuales pueden alimentarse unas 35 mil personas, de acuerdo con estudios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).