Nueva cosechadora de caña producida en Holguín
Holguín, 31 mar (RHC) La fiabilidad técnica y la capacidad de corte de las cosechadoras de caña CCA 5000 M y 5500, ambas de diseño totalmente cubano, fueron mostradas durante recientes pruebas de validación regidas por especialistas del Instituto de Investigaciones de Ingeniería Agrícola de Cuba (IAgric).
Mientras se espera por el tiempo prudencial del que disponen los expertos de esa entidad para emitir el veredicto, lo cierto es que las máquinas producidas en cooperación con una empresa de la República Popular China, han cumplido los requisitos de explotación, entre ellos cortar más de 50 toneladas por hora con un razonable índice de consumo de combustible.
Reyner Morales Mora, ingeniero mecánico y director técnico de la Empresa «60 aniversario de la Revolución de Octubre» (Fábrica de Cosechadoras Cañeras), dijo a la prensa que las comprobaciones, realizadas en la UBPC Yaguabo, en el municipio de Cacocum, agotaron el período de1200 horas establecidas por el IAgric.
A lo largo de esa etapa, confirmó, integrantes del Equipo de Prueba de la Empresa Centro de Desarrollo de la Maquinaria Agrícola (Cedema), que proyectó las máquinas, permaneció al pie de las mismas, pendientes de su comportamiento, igual que el personal de la «60 aniversario de la Revolución de Octubre».
La validación otorgará la licencia para la producción seriada, tarea compleja, porque, además de las negociaciones con la parte extranjera y la inevitable importación de recursos, la fábrica cubana necesita de una actualización tecnológica en función de eficiencia y calidad para lograr el ahorro neto en divisas que se prevé al comparar las máquinas nuestras con las compradas en el extranjero.
«Además, los clientes del país, teniendo un equipo de producción nacional totalmente competitivo, no pueden importar uno similar fabricado en otras naciones, a no ser que nuestro organismo certifique que no estamos en condiciones de producirlo aquí», precisó.
La fabricación en serie de ambas máquinas podrá ser un factor de integración de la industria cubana, confirmó al exponer como ejemplo las posibilidades de las fundiciones, así como de la Empresa Oleohidráulica Cienfuegos y de las fábricas que disponen de pantógrafos láser para cortar con precisión gruesas planchas de metal
(Granma)