Berlín, 23 ago (RHC) El Gobierno alemán estudia la posibilidad de reintroducir el servicio militar obligatorio dentro de su nuevo concepto de "Defensa civil" en caso de situaciones extraordinarias, de acuerdo con un borrador del Ministerio de Interior al que tuvo acceso la agencia de noticias dpa.
Esta posibilidad se incluye en un punto secundario del concepto desarrollado por Interior en el que se podrá reactivar el servicio militar obligatorio en situaciones críticas para "apoyar a las Fuerzas Armadas" en el caso de que Alemania dentro de una misión de la OTAN deba defender sus fronteras.
Los ciudadanos deberán ayudar también en los servicios de correos.
"Se garantizará el envío rápido y seguro de correo importante para el Ejército en el marco de la ley sobre seguridad de las telecomunicaciones y correos", escribieron en el borrador.
Asimismo, el nuevo proyecto del Gobierno alemán para hacer frente a situaciones de emergencia recoge que los civiles apoyen al Ejército en "cuestiones de organización de suministro y de infraestructuras de alojamiento". Además, las empresas civiles deberán participar en la construcción, inspección o arreglo de los cuarteles.
El borrador del nuevo concepto será aprobado el miércoles por el Ejecutivo alemán. Es la primera revisión que se hace desde 1995 y llega un mes después de los atentados registrados en Baviera.
El servicio militar obligatorio fue derrogado el 1 de julio de 2011 tras 55 años, ya que el Gobierno alemán no veía ningún razón de política de seguridad o militar para seguir manteniéndolo. Sin embargo, el servicio militar obligatorio sigue incluido en la Constitución alemana y puede volver a reintroducirse con una sencilla ley.
La ministra alemana de Defensa, Ursula von der Leyen, indicó a finales de junio que a pesar de las tensiones con Rusia y el terrorismo islamista, no veía razón alguna para reintroducir el servicio militar obligatorio. Sin embargo, los últimos acontecimientos parecen haber empujado al Gobierno de la canciller Angela Merkel a estudiar nuevas posibilidades.
Alemania fue sacudida por una serie de sucesos desde el 18 de julio, cuando un refugiado de 17 años, probablemente de Afganistán, protagonizó un ataque con hacha y cuchillo en un tren regional, hiriendo a cinco personas, entre ellas cuatro turistas de Hong Kong.
Pocos días después, un refugiado sirio se suicidó y causó heridas a 15 personas al detonar una bomba en su mochila en la entrada de un concierto en la localidad de Ansbach. La milicia terrorista Estado Islámico reclamó la autoría de ambos atentados.