Moscú, 18 oct (RHC) El presidente de Rusia, Vladimir Putin, confirmó en Moscú la cooperación para resolver el conflicto en Siria, durante una conversación telefónica con el primer ministro de Iraq, Haider Al-Abadí.
Ambas partes manifestaron la voluntad mutua de colaborar en todos los aspectos relacionados con el diferendo sirio.
Putin analizó con el jefe del gobierno iraquí detalles de la operación para liberar la ciudad de Mosul, donde se encuentran atrincherados alrededor de 60 000 miembros del grupo terrorista autoproclamado Estado Islámico.
Moscú informó sobre las medidas para reducir la tensión bélica en la norteña ciudad siria de Alepo, con la suspensión de bombardeos y la concesión de un alto de acciones militares de 48 horas para suministrar ayuda humanitaria a los civiles.
La prensa local recuerda que Rusia fue acusada por Occidente de estar implicada en bombardeos contra civiles en Alepo, algo que Moscú rechaza tajantemente.
En Mosul, también participa en la operación la aviación de las fuerzas de una coalición comandada por Estados Unidos y que evita referirse a víctimas entre la población en esas acciones, comenta la televisión capitalina.
El presidente ruso, Vladimir Putin, participará mañana en una reunión del cuarteto de Normandía, junto a gobernantes de Francia, Alemania y Ucrania, para discutir sobre la crisis en esa última república exsoviética.
Putin viajará a la capital germana para dialogar con la canciller federal alemana, Angela Merkel; su similar francés, Francois Hollande; y ucraniano, Piotro Poroshenko, confirmó el servicio de prensa presidencial.
El trabajo de los ayudantes presidenciales en el transcurso de esta madrugada permitió programar un encuentro en Berlín, informó el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, quien dijo que solo será una oportunidad para "medir e intercambiar opiniones" y será difícil el anuncio de acuerdos concretos.
Rusia, como siempre, aboga por el cumplimiento de los acuerdos de Minsk, pactados en febrero de 2015, en especial, los aspectos políticos como una ley de amnistía y el estatus especial para las sublevadas regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk.
Putin indicó recientemente que consideraría su participación en una reunión en el formato de Normandía solo en caso de que las consultas al nivel de ayudantes presidenciales llegaran a algo concreto para buscar una salida a la crisis ucraniana.
El grupo de Normandía se reúne en la capital alemana, a propuesta de Merkel, y poco después del anuncio de Putin de la cancelación de su visita a París, así como de las contradictorias declaraciones de Hollande sobre el supuesto papel negativo de Rusia en Siria.
Como prólogo al encuentro de mañana, la prensa y varios diputados germanos se refirieron a la posible aplicación de sanciones unilaterales contra Rusia por su posición en Siria.
La cita se efectuará pese a que Alemania y Francia aplican restricciones unilaterales contra Rusia por su rechazo al golpe de Estado en Ucrania, en 2014, y su respaldo a la causa de la población sublevada en las regiones surorientales de Donetsk y Lugansk.
La operación de castigo lanzada allí por las autoridades ucranianas en abril del referido año, causó más de nueve mil muertos, en su mayoría civiles.
El grupo de Normandía surgió, precisamente, como una variante europea para buscar la aplicación de los acuerdos de febrero de 2015 en Minsk para una salida pacífica al diferendo en el sureste ucraniano.
