Managua, 10 ene (RHC) El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, evidenció su compromiso con la paz y la estabilidad social, en el discurso de toma de posesión del cargo de Presidente, y consideró como eje esencial de su mandato avanzar hacia la prosperidad y el desarrollo del país.

Luego de juramentar el cargo como primer mandatario de la nación, junto con Rosario Murillo como vicepresidenta, Ortega refirió que solo a través de la paz se pude erradicar la pobreza y mejorar la calidad de vida del pueblo nicaragüense.

El jefe del Estado nicaragüense refirió que desde el año 2007 el pueblo comenzó a consolidar la paz, no solo en el país sino también en Centroamérica.

Se ha producido el milagro, y fue a partir de ese año, "logramos alcanzar finalmente, la paz", subrayó desde la emblemática Plaza de la Revolución, en el centro histórico de Managua, ante la presencia de jefes de Estado, funcionarios de alto nivel, representantes de partidos políticos, movimientos y organismos internacionales.

Por otra parte, Ortega abundó sobre la historia reciente del país y el contexto nacional e internacional en que triunfo la Revolución sandinista, en julio de 1979, así como las muestras de solidaridad, cooperación y hermandad de países como Cuba y Venezuela.

Camino, apuntó, que no fue breve ni estuvo exento de retos y dificultades, hasta alcanzarse diversos logros en materia de salud, educación, economía y energía, entre otros, así como los esfuerzos realizados en aras de la unidad e integración regional.

La ceremonia de investidura contó con la participación de los presidentes Nicolás Maduro, de Venezuela; Evo Morales, de Bolivia; Salvador Sánchez Cerén, de El Salvador, y Juan Orlando Hernández, de Honduras, así como con el primer vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, entre otras personalidades.

El presidente reelecto de Nicaragua, Daniel Ortega, y la vicepresidenta Rosario Murillo tomaron posesión de sus cargos para desempeñar un mandato por los próximos cinco años.

En sesión solemne de la Asamblea Nacional efectuada en la Plaza de la Revolución de Managua, el titular de ese órgano legislativo Gustavo Porras juramentó a Ortega y Murillo ante la presencia de jefes de Estado, funcionarios de alto nivel, representantes de partidos políticos, movimientos y organismos internacionales.

"Ante la Patria, ante nuestros héroes y mártires, ante el pueblo y la familia de nuestra Nicaragua bendita y siempre libre jura solemnemente respetar la Constitución y las leyes", les preguntó el dirigente parlamentario.

"Sí, lo juro", respondieron el líder sandinista y su compañera de fórmula, quienes reiteraron en sus respectivos discursos de aceptación el compromiso de seguir trabajando por un país libre, tranquilo y seguro que experimente cambios en bienestar de sus ciudadanos con un proyecto de gobierno socialista, cristiano y solidario.

Entretanto, grupos musicales y danzarios amenizaron la ceremonia en el emblemático espacio de Managua, donde los nicaragüenses conmemoran cada 19 de julio el triunfo de la Revolución Sandinista sobre la dictadura de la dinastía de los Somoza en 1979.

Ortega, quien presidió el primer gobierno democrático establecido en el país, de 1985 a 1990, inicia otro mandato de cinco años, tras su arrollador triunfo, junto al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en las elecciones del pasado 6 de noviembre.

En esos comicios, el candidato del partido rojinegro, acompañado por Murillo como aspirante a la vicepresidencia, alcanzó un amplio respaldo popular, al obtener el 72,5 por ciento de los votos.

El acto de investidura contó con la participación de los presidentes Nicolás Maduro, de Venezuela; Evo Morales, de Bolivia; Salvador Sánchez Cerén, de El Salvador, y Juan Orlando Hernández, de Honduras.