Naciones Unidas, 11 ene (RHC) Stephane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, aseguró que el organismo mundial no ha recibido la invitación para participar el próximo 23 de enero en las conversaciones en Kazajistán entre el gobierno de Siria y los opositores.
Afirmó Duyarríc que una vez confirmada la asistencia se decidirá el representante de Naciones Unidas en el diálogo promovido por Rusia y Turquía en Astana, la capital kazaja, como parte de los esfuerzos para encontrar una salida política al conflicto sirio.
Moscú y Ankara impulsan un proceso en Siria, el cual incluye el alto el fuego vigente desde finales del 2016 y el regreso a la mesa de negociaciones.
Por su parte, el gobernador de la provincia de Damasco, Alaa Ibrahim, informó a la prensa que se logró un acuerdo preliminar con los cabecillas de los grupos armados en la zona de Wadi Baradá, a unos 30 kilómetros al norte de la capital siria.
Según la información, se estipula que entreguen su armamento pesado, y los que no son originarios de Wadi Baradá abandonen la zona hacia la provincia de Idleb, mientras que los que permanezcan serán considerados en una reciente ley de amnistía.
Posteriormente, las unidades del Ejército Árabe Sirio ingresearán a la zona para limpiarla de minas terrestres y artefactos explosivos como preparación de la labor de equipos de reparación y mantenimiento a la planta de agua potable de al-Fijeh.
Actualmente, añadió, se trabaja para resolver el estatus legal de los que se mantengan en las aldeas de Wadi Barada, incluídas las de Deir Qanoun, Deir Maqran y Kfir al-Zait después de que los pobladores levantaron la bandera siria.
La región de Wadi baradá es atravesada por el río de igual nombre y sus fuentes de agua abastecen a más de seis millones de habitantes de la capital siria, quienes hasta ahora la tenían raconada ante los sabotajes en al Fijeh.