Bagdad, 1 mar (RHC) Ante la ofensiva gubernamental en el oeste de Mosul, el líder del Estado Islámico (EI), Abu Bakr Al-Baghdadi, aconsejó a sus hombres esconderse, huir o inmolarse, refiere un reporte del canal televisivo iraquí Alsumaria.

La red televisiva en árabe dijo basarse en fuentes locales que citaron una declaración del cabecilla terrorista en la cual reconoció la derrota de su organización en Iraq luego de los avances de las tropas leales a Bagdad para reconquistar el occidente de la segunda ciudad del país.

De acuerdo con la información circulada en la provincia norteña de Nínive, cuya capital es Mosul, Al-Baghdadi tituló su mensaje como 'discurso de despedida' y lo distribuyó el martes entre los clérigos y predicadores del Daesh, acrónimo árabe de EI, resalta Prensa Latina.

Con sus hombres cada vez más acorralados en la actual fase de la ofensiva de las fuerzas policiales y el Servicio Antiterrorista (CTS, por sus siglas en inglés) para recuperar esa localidad, el jefe de los extremistas islámicos dispuso el cierre de la oficina del Daesh que regula a sus combatientes.

Asimismo, ordenó a los takfiristas (terrorista islámico sunnita) no árabes que decidan si 'regresan a sus países o se detonan (hacen estallar)' prometiéndoles a cada uno '72 mujeres en el paraíso', agregó el comunicado siempre según Alsumaria.

Por su lado, el canal satelital Al-Arabiya destacó que muchos dirigentes del EI en Iraq ya empezaron a abandonar sus escondites para dirigirse a áreas controladas por el grupo en la vecina Siria.

El Ejército, la policía federal, el CTS y voluntarios chiitas de la Movilización Popular, todos apoyados por la aviación de la alianza internacional que lidera Estados Unidos, han intensificado los ataques contra el Daesh desde el inicio de la actual ofensiva, el 17 de octubre pasado.

Los bombardeos aéreos permitieron el avance de las tropas hacia zonas dominadas por los yihadistas en las últimas semanas y actualmente el principal escenario de combate se localiza en la ribera oeste del río Tigris, que divide en dos Mosul.

A medida que se recrudecen los enfrentamientos, se incrementa el éxodo de civiles que huyen de la violencia, y la ONU y el gobierno iraquí estiman que en la última semana al menos ocho mil personas salieron de la parte occidental de la ciudad y de aldeas cercanas.

La Agencia de Ayuda Humanitaria de la ONU (OCHA, por sus siglas en inglés) amplió las capacidades en los campamentos de desplazados para poder acoger al creciente número de residentes de Mosul que buscan un sitio seguro.

Según OCHA, un estimado de 250 mil personas podría evacuar la zona de combates en el oeste de la ciudad en los próximos días, pero se cree que unos 750 mil civiles continúan atrapados allí en situación 'desesperada'.