Naciones Unidas, 20 mar (RHC) Estados Unidos acusó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU de librar una campaña contra Israel, en respuesta al comienzo en ese foro ubicado en Ginebra de discusiones sobre los crímenes de los ocupantes en los territorios palestinos.

La representante estadounidense en Naciones Unidas, Nikki Haley, cuestionó al Consejo por mantener en su agenda un tema anual dedicado a las violaciones de los derechos humanos cometidas por los israelíes.

Nikki Haley aseguró que su país no participará en las sesiones relacionadas con ese tema y votará contra cualquier resolución que salga de las mismas.

Se prevé que el Consejo de Derechos Humanos aborde aspectos relacionados con las violaciones de las leyes internacionales, como la colonización de Cisjordania, el uso excesivo de la fuerza por los ocupantes, las demoliciones sistemáticas de viviendas palestinas, los rigurosos controles de acceso y los arrestos administrativos.

Por su parte, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra ad Al Hussein, llamó a combatir todas las formas de discriminación racial, la xenofobia y los discursos y crímenes de odio.

En un mensaje adelantado por el Día Internacional contra la Discriminación Racial, que se celebra mañana, el funcionario rechazó que en el planeta estén en aumento manifestaciones de ese tipo.

"Los afrodescendientes siguen siendo víctimas del racismo. El antisemitismo muestra su fea cara en Estados Unidos, Europa, el Medio Oriente y más allá. Las mujeres musulmanas que usan velo reciben ataques verbales y hasta físicos en muchas partes del mundo, y en Latinoamérica, los indígenas sufren estigmatización", advirtió.

De acuerdo con el alto comisionado, ya es hora que cesen la violencia contra los inmigrantes, la polarización de la sociedad por motivos étnicos y los atropellos contra comunidades específicas.

Vemos ejemplos recientes, entre ellos los ataques antiinmigrantes en Sudáfrica, los discursos de odio que tienen a Sudán del Sur al borde de una guerra étnica y la agresividad en Myanmar contra la comunidad musulmana Rohingya, dijo.

Asimismo, Zeid mencionó el auge de los crímenes de odio en Reino Unido, Estados Unidos y Alemania, motivados por los discursos y las posturas antiinmigrantes.

La situación existente nos lleva a recordarles a los Estados que no hay excusa alguna para permitir el florecimiento del racismo y la xenofobia, así como su obligación legal de prohibir toda forma de discriminación y de garantizar los derechos por encima de razas, colores de piel u orígenes étnicos, señaló.