Washington, 23 mar (RHC) El presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Devin Nunes, denunció que miembros del equipo de transición del primer mandatario norteamericano, Donald Trump, estuvieron bajo vigilancia incidental tras las elecciones de 2016.

De acuerdo con el titular del grupo parlamentario, tuvo acceso a información de inteligencia que sugiere que miembros del equipo, e incluso el propio jefe de Estado, fueron objeto de vigilancia de forma casual, en operaciones realizadas sobre ciudadanos extranjeros, indica Prensa Latina

Esa información me fue provista legalmente por fuentes que pensaban que debíamos saberlo, afirmó el representante, quien advirtió que los reportes abarcan docenas de informes, pero ninguna mención a Rusia.

Lo que he leído me parece ser un nivel de actividad de vigilancia, tal vez legal, expresó el congresista a su salida de la Casa Blanca, a donde acudió esta tarde para informar personalmente a Trump acerca de los datos que dice haber visto.

De inmediato la Casa Blanca y los políticos cercanos al presidente vieron el anuncio de Nunes como una confirmación de las acusaciones del gobernante cuando dijo que había sido objeto de espionaje por orden de su antecesor, Barack Obama.

Sin embargo, el propio titular del Comité de Inteligencia reconoció que eso no significaba vigilancia del anterior jefe de Estado sobre la Torre Trump de Nueva York.

El representante Adam Schiff, el principal demócrata en el panel de inteligencia, puso en duda las afirmaciones de Nunes en una airada declaración y lo criticó por no compartir primero la información con él u otros miembros del grupo.

Schiff también criticó a su colega por informar a la Casa Blanca el miércoles por la tarde, dado que el Comité de Inteligencia está en medio de una investigación sobre la presunta intromisión de Rusia en las elecciones de 2016, incluyendo una supuesta colusión con el equipo de Trump.

El demócrata dijo haber hablado esta tarde con el titular del panel, quien le precisó que la mayoría de los nombres de las comunicaciones interceptadas estaban en realidad enmascarados, pero que aún podía calcular la probable identidad de las partes.

Ante ese hecho, Schiff consideró imposible evaluar la exactitud de las afirmaciones de Nunes, reiterando que no apoyan las acusaciones de la escucha telefónica del presidente a manos del Gobierno de Obama.

Otro miembro del grupo de inteligencia, el también demócrata Jim Himes, manifestó que el viaje del titular a la Casa Blanca plantea todo tipo de cuestionamientos sobre la posibilidad de que la investigación se pueda ver comprometida.

Las acusaciones de Trump sobre espionaje en su contra antes de los comicios del pasado año forman parte de las pesquisas que se llevan a cabo en la Cámara baja.

Tanto el Buró Federal de Investigaciones como la Agencia de Seguridad Nacional y el propio Nunes señalaron reiteradamente que no han visto ninguna evidencia que sustente tales denuncias.