Madrid, 22 may (RHC) Las autoridades de Cataluña expondrán este lunes aquí la que consideran su última oferta al Estado español para acordar un referendo sobre la independencia de esa rica comunidad autónoma, de más de 7,5 millones de habitantes.

En un acto en Madrid, el presidente catalán, Carles Puigdemont, apelará por enésima vez al gobierno del conservador Mariano Rajoy para negociar ese referéndum separatista, que pretende celebrar a más tardar en octubre de este año, indica Prensa Latina.

El Ejecutivo del derechista Partido Popular lo animó el pasado viernes a defender su plan de independencia para esa región en el Congreso de los Diputados, al ser el ámbito apropiado para analizar temas de esa envergadura.

El ofrecimiento fue hecho por la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría, quien convidó a Puigdemont a acudir al Parlamento para presentar su proyectada consulta sobre la secesión de esa región del noreste de España.

'Si el señor Puigdemont tiene interés en que su propuesta pueda llegar a algún término, no creo que tenga inconveniente en debatirla en el Congreso de los Diputados', dijo Sáenz de Santamaría tras la reunión semanal del Consejo de Ministros.

Explicó que el debate de una iniciativa de esa importancia y trascendencia tiene que seguir 'los cauces democráticamente previstos', pues -argumentó- la Constitución de este país europeo no recoge ese tipo de prerrogativas.

Afirmó que la realización de un referendo de autodeterminación en ese territorio sólo es posible mediante una reforma constitucional, que luego deberá ser refrendada por todos los españoles en una consulta nacional.

'Nuestro sistema no admite que el gobierno negocie por su cuenta algo que le corresponde al conjunto de los españoles', remarcó la vicepresidenta de la administración conservadora.

Desde hace unos siete años, la Generalitat (gobierno catalán) impulsa iniciativas que buscan culminar en un futuro estado independiente.

Su intención es celebrar esa votación antes de que concluya 2017, pero el ejecutivo español advirtió en reiteradas ocasiones que impedirá la cita con las urnas por considerarla contraria a la carta magna de esta nación ibérica.